Existen una gran cantidad de cambios físicos en la adolescencia además de las variantes químicas, psicológicas, biológicas, entre otra serie de transformaciones transcendentales para el individuo que lo llevaran a ser el hombre del mañana.
Definición
La adolescencia es una etapa de cambios físicos, biológicos, psicológicos, sociales y familiares, se dan dentro y fuera del individuo una serie de transformaciones que lo van a ir ayudando a definirse a sí mismo.
La adolescencia es una etapa de intensos cambios emocionales y físicos que el joven o la joven deben entender que son propios de la edad y del crecimiento y que se debe asumir con naturalidad.
Los primeros indicios de que se está entrando en la adolescencia son los cambios físicos, que se empiezan a notar en el cuerpo, y estos están relacionados con el crecimiento y el proceso de adaptación de los órganos para su futura reproducción, pero no solo los cambios físicos son los únicos experimentados en esta etapa, esta viene acompañada de cambios psicológicos, emocionales, biológicos y sociales.
Todas estas transformaciones en la manera en cómo se vivan y se asuman determinaran la imagen de cómo se asuma el futuro adulto y de cómo se verá ese individuo a sí mismo y la valoración que el mismo ser dará de sí.
La hipófisis es la glándula responsable de todos los cambios que se van a empezar a dar y a gestar durante la adolescencia, esta se ubica en el cerebro, desde allí se empieza a liberar y a descargar todas esas hormonas que estaban en el organismo de la persona, pero que se encontraban en estado de letargo. Estas hormonas se trasladan por la sangre y se depositan en los distintos órganos del cuerpo, principalmente estas hormonas actúan sobre los testículos en los varones y en lo ovarios en las mujeres.
Esta descarga de hormonas y su estacionamiento en determinados órganos por ejemplo en los órganos reproductores se realiza debido a que se es necesaria la estimulación de las hormonas sexuales tanto masculinas como femeninas, es por ello que esa descarga hormonal se traslada directamente hacia esos órganos.
Ahora bien en los varones este bombardeo sexual hormonal determina e influye en el cambio del organismo y obviamente también en los genitales y lo que está dentro de ellos, es decir, en los testículos se empieza a estimular la producción de espermatozoides que son las células sexuales masculinas.
Mientras tanto en las hembras la progesterona y los estrógenos son los responsables de los cambios en el cuerpo de estas, producto de este cambio, de este tránsito y de esta descarga hormonal se empiezan a dar los cambios en el cuerpo de ella y la maduración y liberación de las células sexuales femeninas como lo son los óvulos y con ello la menstruación, que es el signo que marca el desarrollo de la mujer y de su capacidad reproductiva.
En los primeros años de la adolescencia es cuando se van acentuando mas estos cambios tanto en chicos como en chicas, por ejemplo en ellas generalmente se comienzan a dar estos cambios entre los 10 y los 12 años de edad, mientras que en ellos se manifiestan entre los 12 y los 14 años de edad, ahora esto no quiere decir que el cuerpo y el organismo no sigan experimentando cambios, sino que es en estas edades cuando se evidencian mucho mas y de forma más intensa. (Ver artículo sobre Autoestima en la Adolescencia)
Ya se ha dicho que estos cambios se presentan siempre en los jóvenes de alguna u otra manera, en unos más tempranos y en otros más tarde pero el fin último es que estos cambios y estas transformaciones son inevitables, ahora bien la presión social por experimentar estos cambios es otro de los temas fundamentales para los futuros adultos.
Cuáles son los principales cambios que experimenta el hombre en esta primera etapa de su crecimiento y desarrollo: hay un aumento de la estatura, lo que se denomina o se conoce como el estirón, los hombros y la espalda se ensanchan para darle otra forma a la estructura de su cuerpo, hay una disminución en los niveles de grasa corporal, se activan las glándulas sebáceas, lo que genera el indeseable y a veces bochornoso acné juvenil.
Las glándulas sudoríparas se activan y esto hace que el olor del cuerpo también cambie, haciéndolo un poco más fuerte, el tono de la voz cambia en algunos tonos, vale la pena aclarar que estos cambios en la tonalidad de la voz son progresivos, el pecho aumenta de tamaño aunque este cambio es algo imperceptible o no tan evidente como los demás.
Se comienza a notar el crecimiento de vello en algunas partes del cuerpo como por ejemplo en la cara, con la aparición de la barba y los bigotes, aparecen vellos también en las axilas, las piernas, el pecho y el vello púbico es otro síntoma de crecimiento del individuo.
La piel de los pezones y de los genitales se torna más oscura, y el crecimiento de los genitales se hace evidente, los testículos se agrandan, el pene y la próstata. Producto de esto se presentan las primeras eyaculaciones o poluciones involuntarias durante la noche sin que exista algún tipo de estimulación. Esto marca el carácter reproductor del varón.
Ahora por el lado de las hembras los cambios físicos en la adolescencia más evidentes y notorios son: un aumento en la estatura y el ensanchamiento de las caderas, al contrario que en los chicos la grasa en ellas se acumula en las caderas y muslos, se acentúan más las curvas y la forma de la cintura cambia.
Las glándulas sebáceas también hacen de las suyas en las hembras y con ellas empieza la aparición del acné, las glándulas sudoríparas también se activan y el olor de ella se hace mas fuerte al igual que con el varón. La voz se torna más fina, debido a ese mismo proceso de crecimiento y los senos empiezan a aumentar su tamaño, desde la aparición del botón mamario hasta alcanzar su tamaño ideal.
La aparición del vello en determinadas áreas del cuerpo también se hace notar, como por ejemplo en las piernas y axilas, además de la aparición del vello púbico. Igualmente que en los varones la piel de los pezones y de los genitales se torna más oscura.
Los genitales también crecen, por ejemplo los labios mayores y menores, el útero, la vagina y el clítoris son otros de los órganos que incrementa su tamaño y se definen y con ella la aparición de la menstruación, que viene a significar el desarrollo de su capacidad reproductiva.
Aspectos psicológicos
La adolescencia presenta grandes retos para todos los que están experimentando ese proceso de transformación, tanto el joven como la familia son parte activa de estos cambios que se están gestando en la mente y que se manifiestan en el exterior de ese futuro adulto.
Los cambios físicos en la adolescencia tienen sus repercusiones y están asociados a los cambios psicológicos que experimenta el ser en esta etapa de su crecimiento, existen dos tipos de madurez en los adolescentes; la madurez temprana o precoz y la madurez tardía, en este punto hay una gran dicotomía y tiene que ver con el deseo que expresan los adolescentes de buscar su propia identidad como seres únicos y ser percibidos como unos verdaderos adultos y la otra en el reflejo de ser o parecerse a sus amigos más cercanos o a los de su entorno social.
Resulta muy perturbador para un adolescente que los cambios que él o ella vayan experimentando, no vayan a la par de el de sus amigos o que se presente el de él o ella muy temprano o mucho después que el de sus pares, ya que eso podría causar un alejamiento del grupo y una exclusión social que no se quiere.
A pesar de que para muchos la madurez precoz o la madurez tardía es un problema, no necesariamente tiene que ser así esto no es ni una ventaja ni una desventaja, solamente que cuando estos cambios empiecen a manifestarse, es allí entonces cuando se comienzan a dar y a presentar los otros cambios, entre ellos los psicológicos.
En una investigación que se realizó a un grupo de chicos, se pudo determinar que en el promedio los varones que maduraron antes que el promedio de los de sus edades fueron más equilibrados, tranquilos, estuvieron más dispuestos, además tienen o desarrollan una tendencia a ser lideres y más populares que el resto de sus iguales.
Otra característica de los que maduran antes es que son menos impulsivos, son extremadamente cuidadosos de su apariencia, tienden a ser más cautelosos y se apegan más a las normas y reglas establecidas.
Ahora bien por el lado de los que maduran un poco más tarde estos jóvenes tienden a ser rechazados y dominados, su estado de ánimo es mucho vulnerable, son más dependientes, inseguros y agresivos, se tienden ser mas rebeldes ante los padres y la autoridad de estos, son mas egoístas y solo piensan en ellos y en nadie más.
En este sentido se ha podido determinar también que los jóvenes que maduran antes de su tiempo conservan una ventaja intelectual en la etapa adolescente y ya en la etapa adulta ante los jóvenes que lo hacen de manera tardía, pero muchas de estas diferencias tienden a desaparecer en la adultez. (Ver artículo sobre Alimentación en la Adolescencia)
Hay un equilibrio entre lo beneficioso y lo perjudicial de estar en estas situaciones de madurez temprana o tardía y los efectos de los cambios físicos por sobre los psicológicos. Los que maduran más tardíamente presentan a veces actitudes más infantiles, lo que los hace sentir que están en una niñez más prolongada, interfiriendo en las demandas y exigencias de entrar en una nueva etapa como lo es la adolescencia, los hace ser más flexibles y se adaptan más a los problemas.
Por el lado de las niñas los problemas de madurez temprana o tardía las lleva a enfrentarse a otros desafíos, a ellas no les gusta madurar muy pronto, desarrollan una juventud mas placentera si el proceso se da a la par que las niñas de su entorno, es decir, ni antes ni después todas a la par al mismo momento y en simultaneo.
Las niñas que maduran de manera precoz tienden a ser menos sociables, equilibradas y expresivas, son más tímidas, introvertidas y ensimismadas ante los demás, su actitud negativa hacia la menarquía es lo que marca su estado y su actitud en esta etapa de su vida y de su crecimiento.
Los niveles de autoestima son bajos y la imagen que poseen de sí misma es muy pobre, ya que los niveles de sociabilidad son mínimos, esta sensación de timidez, de no aceptarse a sí mismas, tiene que ver con el nuevo cuerpo que se está formando, con las curvas y la fisionomía de mujer que está empezando a tener y esto contradice los estándares de belleza que están asociados a la delgadez.
Otros de los aspectos relacionados entre los cambios físicos y psicológicos es el relacionado a los tiempos y el estrés que esto pudieran generar en cada uno de los jóvenes que se ven envueltos en estas situaciones, muchos de los conflictos surgidos entre los adolescentes y los padres tienen que ver o muchas veces están vinculados mas a la pubertad que a la edad cronológica y el estrés que puede generar una madurez prematura.
Por ejemplo las niñas que discuten más con sus madres tienden a madurar más rápido físicamente hablando que las otras niñas que tienen en muchos casos relaciones más tranquilas. En la adolescencia la apariencia física y el cómo me veo es la tendencia, es lo más importante y lo más transcendental, incluso mas que cualquier otro aspecto de su vida y de sí mismas.
En muchas ocasiones esa sensación de ansiedad por siempre verse bien y el involucrarse la madre en ese proceso de asistirla con la imagen y compartir un día de compras puede resultar en una experiencia más que enriquecedora, desagradable y hasta a veces tensa. Ahora lo que hay que hacer más que reprochar esas actitudes que son propias de la edad, es tomar esas insatisfacciones y poder mantener o recomponer el autoestima del joven, lo que será mucho más beneficioso.
Para muchas la menarquía es mas que un acontecimiento físico y natural en las jóvenes, aunque esto también significa cambios en sus estructura física, personal y psicológica, por ejemplo es un salto de ser niña y empezar a convertirse en mujer, las niñas que empezaron a menstruar son mucho más conscientes de su feminidad que las otras que aun no lo han hecho o aun no han llegado a este episodio.
Las niñas que ya han alcanzado su primera menstruación se les nota el interés por los chicos por su aspecto físico y personal, su aspecto se suele asemejar mas al de una mujer, son más atrevidas al mostrar las partes de su cuerpo sin llegar al exhibicionismo obviamente y ante ciertos aspectos de su vida se muestran más maduras que las otras niñas de su edad.
Como ya hemos dicho la apariencia en la adolescencia es algo fundamental más allá de cualquier otra consideración, su apariencia y su aspecto tiene una alta valoración, aunque aquí es cuando se comienza la lucha con el espejo y de no gustarles lo que ven delante de él.
En el caso particular de los varones, estos quieren ser altos, atléticos, delgados y con una espalda ancha y desarrollada, en el caso de las niñas quieren ser ante todo bonitas, delgadas pero con una buena figura, de piel lozana, fresca y tersa con un cabello perfecto y bien cuidado.
En el aspecto cualquier artículo u otro símbolo que haga ver a las niñas algo masculinas y a los niños algo de femenino, puede ser fatal y calificarse de miserable, una constante en los adolescentes es que siempre se van a lamentar o a estar insatisfechos con su complexión, su peso y sus rasgos faciales.
Esta tendencia se repite y se tienden a desarrollar más en las chicas que en los chicos y esto tiene su lógica debido a los altísimos atributos que le coloca la sociedad a la belleza femenina por sobre la belleza masculina.
Una tendencia que se repite con el pasar de los años es que a los chicos al preguntarle sobre las insatisfacciones de su cuerpo rápidamente responden que no tienen ninguna queja sobre su cuerpo, mientras que las niñas en su mayoría te dirán que no les agradan sus piernas y sus caderas, es por ello que las niñas se deprimen mas que los chicos o tienen mayor tendencia a ello.
La depresión en esta etapa de la vida la causa su aspecto físico y la apreciación que tengan ellas mismas sobre ello, siempre se van a sentir feas o gordas así no lo estén, si son bajas o altas la queja y la inconformidad vendrán por el tamaño, en algunos casos no estarán a gusto con su forma o con su cabello. En la adolescencia los índices de depresión son iguales en niños y en niñas pero la curva se dispara en las niñas a partir de los 12 años de edad y a los 14 se duplican los índices de depresión en ellos.
Las enfermedades son otro aspecto a considerar en cuanto a su físico y lo psicológico, rara vez los adolescentes padecen de enfermedades, a menos que sean crónicas o padezcan de algún tipo de discapacidad. Los problemas de salud son fácilmente previsibles y se pueden prevenir, ya que están asociados a problemas de pobreza o algún estilo de vida en particular.
Entre los 11 y los 14 años ellos son mas riesgosos y propensos a consumir alcohol, drogas, cigarrillos y llevar una vida sexual más activa, esto está vinculado a circunstancias, étnicas, sociales y raciales más en los muchachos que en las hembras. Los problemas de salud más comunes en los jóvenes adolescentes son nerviosismo y estrés, y las consultas más comunes son por problemas cosméticos y su aspecto físico, tos irritaciones en la garganta en ellos y en ellas los cuidados prenatales.
Ahora en los adultos las preocupaciones más comunes que puedan rodearlos a ellos en función de los padecimientos de algún hecho de salud en los adolescentes son el consumo de drogas, alcohol, el contagio de alguna enfermedad de transmisión sexual y embarazos precoces.
Tipos
Son diversos los cambios físicos en la adolescencia y de los que se experimentan en esta etapa de transito de dejar de ser niño a comenzar a ser adulto, es un proceso interesante que a veces muchos definen como difícil o conflictivo.
Los cambios físicos en la adolescencia es lo que permitirá la maduración de este para que luego se convierta en un adulto pero antes de llegar a esto, se deben pasar y experimentar una serie de cambios, los cuales todos ellos en su conjunto se empiezan a gestar en la pubertad, es un proceso de adaptación entre dejar de ser niño para empezar a ser un joven que posteriormente se convertirá en un adulto, pero ese proceso lleva algunos años.
En la pubertad es cuando el individuo adquiere sus plenas facultades reproductivas, aunque en cada caso se manifiestan de manera diferente según el sexo y la edad, en la mayoría de los casos estos cambios están vinculados también a la raza, a la genética, a la alimentación, al entorno geográfico y los estímulos sociales y psíquicos.
Se dice que usualmente la pubertad se inicia a los 8 años de edad, pero se empieza a manifestar en las niñas a partir de los 11 años y en los niños a partir de los 12 años de edad. En algunos países estas edades o tiempos cronológicos se adelantan debido a factores tales como la alimentación, la calidad de vida y una buena salud. En el caso particular de las niñas es muy común que debido a estos aspectos logren en edades más tempranas el desarrollo de su actividad reproductiva.
Los cambios físicos más comunes, fundamentales y normales en los adolescentes son: el crecimiento óseo y de algunos órganos internos, la composición corporal cambia y la maduración de los órganos sexuales y su capacidad reproductora, así como los caracteres sexuales secundarios.
El aumento de la talla es una de los más evidentes y más característico de los cambios en las niñas entre los 14 y los 15 años de edad y entre los varones se presenta este crecimiento en la talla a partir de 12 o 13 años, este cambio es uno de los más evidentes que tiene una duración aproximada de 24 a 36 meses, es decir de 2 a 3 años, en este tiempo las niñas pueden llegar a crecer de 20 a 23 centímetros y los niños de 24 a 27 centímetros.
Este proceso no se presenta de manera vertiginosa, sino que se va presentando de manera progresiva y escalonada, en primer lugar crecen las extremidades inferiores, es decir, las piernas, luego el proceso alcanza el tronco del individuo, para luego pasar a las extremidades superiores o los brazos y termina en la cabeza, en la manera de cómo se van dando estas disparidades en las proporciones generan la sensación de torpeza e inseguridad en el adolescente. (Ver artículo sobre Adolescencia y Pubertad)
El crecimiento se detiene definitivamente cuando la epífisis de los huesos se cierra y se marca así talla definitiva del individuo, aunque antes de que esto ocurra en las niñas ocurre lo que se llama un remate en el crecimiento entre los 16 y 17 años y en los varones sucede a los 21 años de edad.
El cuerpo también experimenta cambios fundamentales como por ejemplo: la densidad de los huesos, la masa muscular y el peso aumentan significativamente, es por lo que se presenta un redistribución de la grasa corporal en ellas y en ellos una eliminación de la misma que le dará una mejor complexión. Internamente crecen órganos vitales como por ejemplo, cerebro, pulmones, riñones, hígado y corazón.
Los cambios que ocurren en la pubertad tienen un responsable directo y son las hormonas que empiezan a segregarse luego de un letargo y es cuando el organismo les da la orden empiezan a expulsar a través del torrente sanguíneo esas andanadas de testosterona, estrógenos y progesteronas.
Estos cambios neurohormonales solo persiguen una cosa, darle una maduración sexual al individuo en su capacidad reproductiva y todo esto comienza en la pubertad y se va desarrollando en la medida que se va creciendo, claro cada género con sus propias características y complejidades.
La maduración sexual está vinculada al sistema nervioso central ya que este interviene directamente, junto a él está el hipotálamo, la hipófisis y las gónadas que son las responsables de la segregación de todas estas sustancias químicas que producen esos cambios en el organismo. Por ejemplo las gonadotropinas y las gonadotrofinas hipofisiarias son las hormonas encargadas de los cambios en los adolescentes.
Los chicos segregan gonadotrofinas hipofisiarias hormona que se encarga de la producción de espermatozoides, estimulan las células de los testículos que ayudara a formar la testosterona lo que ayudara al crecimiento del niño, aquí también con la segregación de estas hormonas maduran los genitales en su conjunto, es decir, próstata, pene y testículos, contribuyen también a la aparición de caracteres sexuales secundarios como los son los vellos en distintas partes del cuerpo a saber, cara, axilas, piernas, pecho y genitales, adicionalmente se produce un aumento en la libido.
En ellas la segregación de hormonas estimula la maduración de los ovarios y se activa la producción de otras hormonas como lo son las progesterona y los estrógenos, con estos cambios se produce la ovulación y los primeros ciclos menstruales. Los estrógenos y el estradiol son los estimulantes del crecimiento de las mamas, del útero y de los genitales externos.
La grasa corporal aumenta producto de la liberación hormonal en el organismo, la velocidad en el crecimiento de la talla son estimuladas por estos procesos de cambio. La progesterona tiene su protagonismo al ayudar a la maduración del endometrio y en las glándulas mamarias, en el desarrollo de la pubertad de las chicas hay un descargo de testosterona lo que influye también en la aparición de vellos en las axilas, piernas y genitales.
El primer ciclo menstrual aparece alrededor de los 12 años de edad o lo que se conoce como menarquía, aunque en muchos casos esta se presenta a los 9 años, lo que no es usual o común, luego de la primera menstruación la niña puede llegar a crecer unos 5 o 10 centímetros más, desvaneciendo el mito que se dice que luego del primer ciclo menstrual se detiene el crecimiento de la niña.
Entre los 10 y los 14 años de edad el varón experimenta un crecimiento y desarrollo sexual importante y significativo, lo que se manifiesta con la producción de espermatozoides, ahora la aparición de los caracteres sexuales secundarios son los que marcan y definen realmente la feminidad y la masculinidad de cada individuo.
Su aparición puede darse de manera temprana o tardía, lo que podría generar algunos problemas de autoestima en el adolescente al no sentirse que esta o va a la par de sus compañeros, lo que le podría generar serias consecuencias de orden social.
En el caso de los varones los caracteres sexuales secundarios están marcados por la aparición de vello en varias partes del cuerpo como por ejemplo, en la cara con el bigote y la barba, en el pecho, en las axilas, y en las piernas así como también en los genitales, el cambio de olor por la activación de las glándulas sudoríparas y el cambio en el tono de la voz que se va presentando de manera progresiva.
En el caso de las chicas estos caracteres secundarios vienen dados por el crecimiento de las glándulas mamarias, la aparición de vello en las axilas, piernas y genitales, el cambio en el tono de la voz y el olor corporal, por la misma razón que en los chicos así como también la segregación de grasa de las glándulas sebáceas lo que produce el acné.
Es muy importante estar consciente de todas las etapas del crecimiento del adolescente, para brindar un apoyo, comprensión, confianza y paciencia por parte de los padres, ya que de alguna u otra manera todos hemos experimentado este periodo que es normal y natural pero que para otros es complicado y difícil.
Primarios y secundarios
Los cambios físicos en la adolescencia son variados, van a depender del genero, y de la edad de cada individuo, unos aparecerán antes otros ser demoraran un poco mas pero no se van a poder evitar y para eso hay que estar preparado.
La niñez es una etapa de descubrimiento, de exploración, observación, en esta el niño va descubriendo su propio yo y va buscando su verdadera identidad. En la adolescencia es en donde se van a producir más cambios en todos los sentidos y uno de ellos son los cambios sexuales que van evolucionando según se vaya dando el crecimiento del joven o la joven en cuestión.
Los cambios que se presentan en la adolescencia son los caracteres sexuales secundarios en hombre y mujeres por igual, el cuerpo experimenta cambios y hay una fuerte manifestación por el deseo sexual, aparece la necesidad de la búsqueda de estrechar vínculos y relaciones afectivas con los individuos del sexo opuesto.
En la etapa adulta de mayor madurez ese interés por el vinculo en las relaciones afectivas con el sexo opuesto se mantienen al igual que el deseo sexual pero de una manera más relajada y no tan estresante y desesperada como se suele manifestar en la adolescencia.
La pubertad como ya dijimos anteriormente es la etapa en donde el flujo hormonal que estaba dormido en el organismo se despierta y comienza a hacer de las suyas en el organismo de los y las jóvenes, es aquí en donde a partir de los 9 hasta los 14 años los niños que ya no lo son comienzan a ser jóvenes y empiezan a ser adultos, experimentan cambios transcendentales en sus vidas. (Ver artículo sobre Noviazgo en la Adolescencia)
La maduración sexual es uno de esos cambios y se manifiesta en el hombre con las primeras poluciones o eyaculaciones y en las mujeres con la primera menstruación o menarquía, aunado a esos cambios fisiológicos, el organismo tanto de ellos como de ellas experimentarán otra serie de cambios, tales como psicológicos y morfológicos que se estarán presentando por un lapso de 4 años aproximadamente.
La pubertad supone que es una etapa de cambios en las que ambos el niño y la niña biológicamente hablando se transforman y obtienen la maduración de sus órganos reproductivos y alcanzan una mayor capacidad en este sentido. La dimorfia sexual existente entre hombres y mujeres es lo que define los caracteres primarios y secundarios entre ambos sexos.
Por ejemplo, los caracteres sexuales primarios entre los hombres y mujeres están determinados desde que se nace y es lo que establece la distinción entre ser hombre o mujer desde el nacimiento, es decir, los órganos sexuales masculinos y femeninos es lo que marca la diferencia en este sentido entre uno y otro.
Ahora los caracteres sexuales secundarios son aquellos que no están vinculados o asociados con la reproducción pero que de igual manera contribuyen a la diferenciación de de los sexos.
En el caso de las niñas los caracteres sexuales secundarios están determinados por el crecimiento de los órganos sexuales reproductivos, como por ejemplo vagina, útero, ovarios y labios internos y externos.
El desarrollo del botón mamario el crecimiento de los senos y su formación completa hasta obtener su forma y tamaño ideal, el ensanchamiento de las caderas, la aparición del vello en las axilas y genitales, el incremento y distribución del tejido adiposo, la secreción de las glándulas sebáceas que contribuyen con la aparición del acné, la activación de las glándulas sudoríparas y el cambio del olor corporal y el cambio en el tono de la voz son algunos de los caracteres secundarios que experimentan ellas en esta etapa.
En ellos pasa algo similar el tamaño de los genitales aumenta, es decir, el pene, los testículos y la próstata, la voz se torna más graves o más gruesa, el desarrollo corporal se hace presente y con ella una musculatura mas formada, la aparición de vello en la cara, axilas, pecho, piernas y genitales es muy notorio, la secreción de las glándulas sebáceas y las sudoríparas hacen que aparezca el acné y cambie el olor corporal respectivamente.
De esta manera se establecen y se determinan los caracteres sexuales primarios y secundarios en hombres y mujeres y su desarrollo en la medida en que se va creciendo y experimentando cada etapa del crecimiento desde la pubertad hasta la adultez, que es donde esa vorágine hormonal cesa y se equilibra para darle paso a un ser mas independiente, más equilibrado, más racional y más maduro para afrontar la vida, los retos y las responsabilidades.
Cambios físicos en la adolescencia del hombre
Los cambios físicos en la adolescencia del varón son un punto de partida importante para que este se empiece a asumir como un hombre o la entrada en la etapa de ser o convertirse en uno.
Durante los años de la pubertad el varón comienza a experimentar una serie de cambios hormonales que se manifiestan en su físico y en su mente, en sus emociones y en su manera de ser, de relacionarse y comportarse con los demás, aunque el reloj biológico actúa de diferentes maneras según cada individuo y los cambios que se van presentando igualmente se van manifestando en función de esos tiempos.
Entrada ya la pubertad el tamaño de los testículos y del escroto tienden a aumentar de tamaño, en pocas palabras se duplica en su dimensión, en la medida en que estos siguen creciendo la piel de esa zona se tiende a oscurecer, ya las bolsas empiezan a colgar y se empiezan a percibir unas pequeñas protuberancias, que no son mas sino los folículos pilosos, generalmente en la mayoría de los varones un testículo siempre va ser más grande que el otro, regularmente siempre es el izquierdo.
En la medida en que se van presentando los cambios van apareciendo otras características como por ejemplo el vello, este es producto de la testosterona que hace un rápido efecto en los jóvenes y hace que se presenten los vellos como el indicio de una etapa más del crecimiento del varón. Este vello es claro y fino y se comienza a apreciar en la base del pene.
En la medida que va pasando el tiempo el vello cambia de color y modifica su textura, se vuelve más rizado y más grueso, con el pasar del tiempo llegara a cubrir la zona púbica y se extenderá hasta la zona de los muslos, una delgada línea de vello se trazara hasta el ombligo, a los años o a los dos años para ser mas especifico una vez que el vello se hace evidente en los genitales, este aparece en el rostro formando bigotes y barba, en las piernas, en las axilas, en los brazos y posteriormente en el pecho. (Ver artículo sobre Psicología del Adolescente)
Existe una paridad en la cantidad de fuerza física que posee tanto el varón como la hembra, esta fuerza es paritaria hasta un periodo de la adolescencia cuando en el caso del varón la fuerza física se incrementa considerablemente, corporalmente ellos se tienden a ver más desgarbados y gordos producto de la elongación de las extremidades inferiores, superiores y del tronco, aunque esto no se presenta simultáneamente.
En la medida en que se va dejando atrás la pubertad el cuerpo se va estirando, dando un salto en ese estirón en el máximo nivel de la maduración sexual, las proporciones corporales cambian al crecer las piernas y el tronco, haciendo ver ciertas asimetrías y signos de torpezas en algunos casos, el aumento de la masa muscular es mucho más evidente en los varones que en las hembras, es por ello que al final de la adolescencia el varón posee 12% más de grasa que la hembra.
El pene es otro de los órganos que se ve favorecido en esta etapa del crecimiento del varón, por ejemplo, los genitales de un joven tienen o tendrán el aspecto de los genitales de un adulto al estar ubicado en una edad de entre los 13 y los 18 años de edad, en primer lugar este órgano se alarga y luego se ensancha.
En la adolescencia es muy común que dediquen tiempo excesivo al examen de su órgano reproductor, lo que los lleva muchas veces de manera manifiesta y muchas veces en secreto a comparar su tamaño con el de otros varones, siendo su principal inquietud el tamaño y las dimensiones de este.
Muchos adolescentes no logran entender que el desempeño del pene nada tiene que ver con el tamaño que este tenga ni cuando este flácido, esto no quiere decir que su comportamiento o su apariencia será igual cuando este en estado de erección, lo más recomendable es acudir a un médico o pediatra de confianza o en todo caso afirmarle al adolescente que no debe preocuparse por el tamaño de su pene, ya que eso siempre es una duda que los martiriza en esta etapa de su vida.
Otra de las preocupaciones entre los adolescentes es la presencia del prepucio y el proceso de la circuncisión, esta es una decisión que toman los padres o simplemente es una manifestación y tradición religiosa en muchos casos, pero eso lleva a preguntarse a los adolescentes el porqué la presencia o la ausencia de esto en su pene.
Uno de cada tres adolescentes presenta pápulas en el pene, estas son pequeñas protuberancias de color rosa nacaradas ubicadas en la corona del glande, aunque son diminutas y no representan ningún peligro, el adolescente puede creer que se ha contagiado de alguna enfermedad de transmisión sexual, lo que no es así, estas generalmente son permanentes y son imperceptibles a penas se notan a simple vista.
Con el crecimiento de los testículos y la producción de espermatozoides se cree que los varones son capaces de procrear en su primera eyaculación, lo que es muy probable ya que este proceso de maduración hace posible que esto suceda, una vez agrandados los testículos la producción de testosterona también se inicia, además de la próstata, las vesículas seminales y las glándulas de Cowper completan el cuadro necesario para la producción del semen necesario para que esto suceda.
Los sueños húmedos son más comunes de lo que se cree y las masturbaciones también, ya que forman parte del proceso de exploración y conocimiento del propio cuerpo y de las sensaciones que se deben y se tienen que sentir y experimentar en esta etapa de la vida. En el caso de las eyaculaciones nocturnas sin estimulación estás tienden a confundir al joven ya que no se sabe que es exactamente o si fue que mojo la cama como cuando estaba infante.
Ante estas inquietudes que se les recomienda a los padres tratar este tema con seriedad y altura, sin reclamos, chistes o reproches, explicarle que esto es normal en algunos varones que en la pubertad se va seguir presentando estos episodios y que se van a detener al tiempo.
Se tiene que afrontar el tema de la masturbación como algo normal, natural e inofensivo tanto para niños como para niñas, siempre y cuando se haga en privado y no ocasione incomodidades, ahora bien las erecciones involuntarias también son normales y aparecen sin ningún motivo o estimulación aparente.
Esas estimulaciones involuntarias no se pueden evitar ya que no se sabe en que momento se van a presentar y siempre suceden en los momentos más inoportunos, ahora como revertir esto es muy poco lo que se puede hacer, algunos recomiendan concentrarse en otros pensamientos menos estimulantes, pero esas acciones con el tiempo irán pasando y desapareciendo.
El cambio en el tono de la voz es otro de los procesos que experimenta el niño casi joven luego después de la pubertad, cuando la laringe y las cuerdas vocales se agrandan, este cambio es gradual y progresivo es por ello que a veces la voz del niño sufre variaciones en su tono y una vez que la laringe logra alcanzar su tamaño ideal estas alteraciones cesan, en el caso de las niñas el tono de la voz también cambia pero no es tan impresionante como el de los varones.
Al iniciarse la pubertad muchos varones experimentan sensibilidad en las tetillas, es lo que quiere decir que su tamaño se está incrementando así no se perciba tan evidentemente como otros cambios, al menos tres de cada cuatro adolescentes experimentaran crecimiento en los pectorales, esto es producto de una reacción bioquímica en la que parte de la testosterona se convierte en estrógeno y produce este crecimiento.
Hay casos en los que este crecimiento llega a ser de hasta de cinco centímetros debajo de las tetillas, en ciertas ocasiones puede llegar a ser más grande lo que desencadenaría en un problema médico denominado ginecomastia profunda. Los niños obesos son más propensos a presentar este problema debido a la acumulación de tejido adiposo en esa zona del cuerpo.
Este problema se tienden a solucionar en un lapso de uno o dos años no mas de ahí, existen casos extraordinarios en los que en este mismo periodo no se soluciona el problema sino que al contrario las tetillas tienden a incrementar su tamaño, en este caso se recomienda cirugía para evitar daños en el joven desde el punto de vista psicológico.
Aunque existen otras razones médicas por las cuales se presenta esta condición de crecimiento anormal en los senos o tetillas de los hombres una de ellas es trastornos endocrinos, los trastornos suprarrenales que pueden ser congénitos, trastornos cromosómicos, enfermedades de carácter hepáticas y otros trastornos genéticos poco comunes que pueden contribuir al desarrollo de estas anomalías, que no son graves pero que si representan una incomodidad para quien las presenta.
Aunque existen otros alicientes para el crecimiento de las tetillas en los hombres que son provocados por el consumo de algunos fármacos como por ejemplo los ansiolíticos o antidepresivos, el consumo de medicamentos para el reflujo o la exposición a estrógenos o fuentes de estrógenos como por ejemplo la soja, el uso de fitoestrogenos presentes en lociones o artículos de aseo personal, se cree que existen algunos agentes ambientales o algunos artículos de plásticos, pero esto no se ha podido determinar del todo.
Emocionales
Los cambios físicos en la adolescencia están acompañados de otra serie de transformaciones que van muy de la mano con lo que a simple vista se puede ver en el o en ella, esas otras manifestaciones del crecimiento tiene que ver con las emociones.
La adolescencia está vinculada a muchos cambios muchos de ellos pueden ser perturbadores o abrumadores, pero contar con el apoyo de los padres puede ser de gran ayuda para sopesar las inseguridades que muchos jóvenes pueden llegar a sentir. La incertidumbre de no saber en que se convertirá el niño dulce y amoroso que fue en la niñez para ahora experimentar los efectos de la adolescencia es un temor de muchos padres.
La paciencia es los mas importante y se debe recordar que como padres, también se fue joven y adolescente, lo que si hay que tener es la suficiente información para poder sobrellevar estos problemas que no son nada extraordinarios, sino que simplemente hay que saberlos llevar con calma, paciencia, comprensión y estableciendo alianzas con el joven.
La adolescencia está marcada por una serie de cambios como ya hemos descrito anteriormente en áreas cognitivas, psicológicas, fisiológicas y sociales que ayudan a que ese joven pueda adaptarse y ajustarse mejor a lo que está viviendo y experimentando. En los niños esto sucede entre los 12 y los 16 años mientras que en las niñas va entre los 10 y los 14.
Ahora en cuanto a los cambios fisiológicos se presentan gracias a esa explosión de hormonas que se esparcen por el organismo generando las transformaciones externas que son las más fáciles y las más sencillas de reconocer, ahora por el lado de las transformaciones y cambios internos aunque comienzan antes de las evidentes y su manifestación más importante es en el crecimiento de los órganos sexuales masculinos y femeninos. (Ver artículo sobre Adolescencia Tardía)
En este caso es mejor hablar con el joven sobre los cambios que va a experimentar e irá experimentando, siempre resulta más beneficioso hablarlo en casa, ya que lo que no se encuentra en casa, seguramente lo buscaran en la calle y de seguro lo que encontraran serán informaciones erradas o distorsionada que en vez de aclarar las dudas complicara aun más el panorama y tomaran esa información como cierta.
El brindar seguridad en este proceso de crecimiento es importante y fundamental, ya que las niñas experimentaran crecimiento de los senos y las caderas y el varón crecimiento de sus órganos sexuales y esto les generara ciertas inseguridades que se deben disipar, a través de ese acompañamiento sobre todo cuando suceden episodios de desarrollo temprano o tardío.
Hay que explicar con antelación todas las facetas y los cambios que se van a ir generando y no tratarlos en la medida que vayan apareciendo, debido a que cualquier anomalía la pueden detectar e informar e ir haciendo los correctivos necesarios, eso por un lado y por el otro, explicarles y dejarles claro a las niñas que van a empezar a sangrar o menstruar que es normal y forma parte del proceso de crecimiento y las poluciones y erecciones e los varones, para que estén conscientes de estos cambios.
Por el lado de los cambios emocionales es importante decir y destacar que la adolescencia es una etapa de adaptación, tanto para los padres como para el propio joven que está viviendo y experimentando este proceso, si a esto le sumamos los cambios hormonales que inciden en las variaciones de humor esto estamos en presencia de un ser que puede estar en un estado de alegría desbordante pero al segundo siguiente puede caer en una tristeza profunda sin razón o motivo aparente.
Estar cerca en este proceso para ayudar al balance y al equilibro emocional, apoyando y entendiendo que son episodios naturales y normales de esta etapa del crecimiento evitara los conflictos y las peleas por estas razón, se trata de escucharlo y ayudarlo a superar esos episodios de humor repentino, pero al mismo tiempo se debe saber cuando alejarse para darle ese espacio y esa libertad que necesita para liberar y descargar sus impulsividades.
Hay que tener en cuenta que esta es una etapa de definición de identidad y de la superposición de la apariencia por sobre cualquier otra cosa, la apariencia prevalece siempre por sobre las demás cosas en esta etapa de la vida, y será muy común verle diferentes estilos al vestir hasta que haya encontrado el que lo identifique y tomar distancia de las apariencias de los adultos y no parecerse a ellos.
La opinión de los otros sobre mí es muy importante sobre todo la de los amigos y los más cercanos a mi entorno, ese sentido de pertenencia a algún grupo no es del todo malo, siempre y cuando contribuyan con el desarrollo de pensamientos positivos y a un buen desenvolvimiento social. Ahora hay que estar muy alertas como padres de que el niño no esté incurso o inmerso en algún tipo de manipulación negativa por parte de su círculo de amigos, ya que esto los lleva a manifestar conductas negativas y dañinas.
El tiempo que le dedican a estar conectados a internet, a las redes o simplemente en los dispositivos móviles, que los envuelve de tal manera puede ser perjudiciales, son herramientas de interacción y comunicación y que para los jóvenes son vitales. Es importante saber qué ven y que consumen en las redes, conocer de ellas para saber a que están expuestos, es recomendable buscar un balance entre lo real y lo digital y sopesar ambos mundos.
Es de suma importancia escucharlos y prestarles atención a lo que nos quieren decir mas allá de lo que manifiestan a viva voz, es muy importante estar pendiente de sus actitudes, de sus movimientos corporales, de los que nos transmiten a veces entre líneas, los adolescentes son seres que están bajo contantes riesgo, es por ello saber siempre escucharlos con atención.
Es muy importante no interrumpirlos porque ello podría limitar sus conversaciones, lo mejor y lo más sano es dejarlos expresar todo lo que quieres y deseen y una vez escuchado todo lo que quieren decir, emitir una opinión sin juzgar o reprochar, no es recomendable mostrar enojo o rechazo, ya que esto coloca una barrera y vulnera la confianza que se pudiera tener, claro todo dependerá de los que se este tratando y del tema que se esté abordando.
Muéstrale siempre respeto por las opiniones que manifiesten no las consideres o manifiestes que son equivocadas de entrada, preséntese como una guía como un apoyo en vez de decir estas equivocado, porque no decir, tienen razón pero no sería mejor hacerlo o decirlo de tal o cual manera. Estas acciones mantendrán la confianza y no se sentirán rechazados o juzgados.
La comunicación entre los padres y los hijos debe ser adecuada y constante, debe existir respeto y confianza y se deben establecer vínculos que sean amorosos pero que a la vez sean de firmeza y de una disciplina necesaria que les permita crecer con libertad pero que al mismo tiempo se sientan protegidos y respaldados de los peligros que acechan en una etapa tan vulnerable para ellos.
Conductuales
Para muchos esta etapa del crecimiento es algo difícil loas cambios en la adolescencia aparte de ser evidentes en la parte física se manifiestan de muchas maneras en su conducta y su carácter es por ello que en este proceso la intervención de la familia es fundamental.
En esta primera fase abordaremos los cambios físicos experimentados por los adolescentes una vez entrado en el proceso de pubertad y mas allá de los cambios físicos evidentes como lo son la estatura y la figura se presentan otros como por ejemplo la aparición del vello púbico el vello en otras partes del cuerpo, en ellos en la cara, axilas, pecho, piernas y en ellas solamente en axilas, piernas y genitales.
Otros cambios son el olor corporal, el acné, cambios en la voz, en ellas el crecimiento de los senos y la aparición de la menstruación y en ellos el crecimiento de los genitales y las poluciones.
Los cambios siempre se inician en la pubertad casi siempre a la misma edad, salvo excepciones de desarrollo temprano o tardío, pero generalmente siempre se inician estos cambios entre los 8 y los 13 años en ellas, mientras que en ellos estos cambios se tardan en aparecer dos años más. Estas características varían entre unos y otros, en unos se da de manera mas acelerada y en otros más lenta.
La autoimagen y el concepto que se tiene sobre si mismo y sobre la apariencia es un tema de vital importancia en los primeros años de la adolescencia, en ambos géneros la imagen y la apariencia tiene un valor inconmensurable, lo que antes era simple ahora es prioridad y la lucha es por ser alto o bajito, flaco o gordo, tener bien arreglado el cabello o no y una lucha de la adolescencia es el acné.
Un problema si se quiere que manifiesten los adolescentes es que en este proceso de crecimiento no todos los órganos crecen y se desarrollan al unisono, es por ello que se ven a veces desproporcionados, por ejemplo las manos y los pies crecen mas rápidos que las piernas y los brazos, por esta razón se sienten torpes y realizan movimientos que los hacen ver lerdos al desempeñar alguna actividad física.
El crecimiento y la velocidad en la que este se manifieste influyen en muchos aspectos de la vida del adolescente, por ejemplo los intereses de una niña de 11 años no van a ser los mismos que los de una niña de 14 años.
Ahora bien los adolescentes que se desarrollan o bien sea muy temprano o muy tarde también desarrollan otro tipo de preocupaciones y problemas, en el caso de los varones que su desarrollo es tardío sienten que no pueden participar en actividades deportivas y competir con los más desarrollados porque existe un sentimiento de inferioridad.
Ahora en el caso de las niñas que se desarrollan antes que los varones sienten que no están preparadas física, mentalmente y emocionalmente para afrontar una situación que se entiende como de adultos, hay edades para cada ocasión y para cada cambio, pero hay momentos en los que estas situaciones se salen de control y es entonces cuando la edad y los cambios, los amigos, la familia y la sociedad en general responden ante estos cambios y esto genera conflictos interno en el adolescente que pueden repercutir a largo plazo.
Según las apreciaciones de cada quien estos cambios tempranos pueden traer ciertas ventajas como en los deportes o practica de alguna actividad física por ejemplo. Ante esto muchos adolescentes van experimentando estos cambios con perspectivas y expectativas distorsionadas de lo que realmente son, es por ello que es fundamental, brindarle toda la ayuda, asesoría, y acompañamiento posible para asegurar un crecimiento y desarrollo normal y optimo.
En cuanto a los cambios en la conducta de los adolescentes seguramente si están pasando por este proceso o están próximos a enfrentarlo deben estar atentos a señales tales como baja en las calificaciones, comen mucho o poco, no logran dormir bien o están algo retraídos es preciso prestarle más atención a estas señales y buscar ayuda profesional que instruya y ofrezca herramientas de cómo abordar estas situaciones que no dejan de ser por demás preocupantes.
Hay señales claras que deben llamar nuestra atención y actuar en consecuencia cuando veamos que se presenten, por ejemplo, cuando se presenten cambios súbitos de conducta, hay un desinterés por las actividades que usualmente realizaba, hay un bajón en el rendimiento académico, se sospecha o se tiene la certeza de que se esta consumiendo alcohol o drogas.
Hay situaciones más graves como por ejemplo que se sospeche que se tiene tendencia al suicidio, hay actitudes violentas y agresivas, a veces se comporta de manera tímida y recurrentemente evita el contacto con las personas, hay ciertos trastornos en la alimentación, presenta problemas para conciliar el sueño y dormir bien, le cuesta concentrarse en alguna actividad y tiende a ser hiperactivo.
Existen adolescentes que son más propensos a ser considerados como mas riesgosos que otros ante determinadas situaciones, pero en todo caso nadie es responsable hasta cierto punto de los cambios conductuales o de la salud mental del adolescente. Pero hay situaciones que logran encender las alarmas ante la presencia de comportamiento.
Por ejemplo hay razones que para algunos pueden resultar insignificantes pero esas situaciones para otros tienen un gran peso y un gran significado, por ejemplo una mudanza, ya que aquí existe un desarraigo, la ausencia de algún familiar considerado como un gran apoyo o alguna situación de estrés familiar, son razones que desencadenan cambios conductuales importantes en los adolescentes.
La presencia de alguna enfermedad o alguna condición médica influye también en este sentido, alguna perdida a causa de una muerte o separación de los padres son indicios de algunos cambios en las conductas de los adolescentes, ser víctima de algún tipo de abuso bien sea físico o sexual dentro o fuera del entorno familiar es otro de los motivos de estos cambios y si a eso le sumamos el bullying, son razones de sobra para entender muchas de las actitudes que pudieran exteriorizar.
A quién acudir si vemos estas señales en algún adolescente, existen especialistas en cada área de la salud mental y conductual que podrían ayudar, diagnosticando y tratando estas condiciones que describimos anteriormente, por ejemplo están los psiquiatras infantiles que abordan los problemas de los niños y adolescentes, están capacitados para brindar tratamiento a una amplia gama de problemas emocionales y de conductas y si es necesario esta en sus posibilidades recetar los medicamentos necesarios.
Están también los psicólogos, están también preparados para diagnosticar y examinar problemas de conductas, problemas emocionales y problemas aprendizaje. Existen otros especialistas como por ejemplo los psicólogos escolares quienes evalúan y aconsejan a los niños con problemas de aprendizaje, conductas y emotivos.
Están también los neuropediatras que se especializan en tratar a niños y adolescentes con problemas de en el sistema nervioso, ellos escudriñan si el problema de aprendizaje y de conducta del niño se debe a algún padecimiento cerebral y establecer si fuese el caso el tratamiento a seguir.
Y por ultimo esta el especialista en adicciones éste está preparado y capacitado para diagnosticar y tratar el tema del uso y el abuso de drogas en niños, adolescentes y en su seno familiar, estos especialistas pueden estar conformado por un grupo de psicólogos, psiquiatras, consejeros familiares y trabajadores sociales.
Cómo podemos abordar a un adolescente para tratar sus cambios de conducta, pues bien de entrada es muy probable que el joven se cierre a recibir la ayuda e incluso a despreciarla porque cree que no la necesita, estos seguramente sea por vergüenza o temor y creer que no está loco y que no necesita la ayuda de un especialista que le ayude a canalizar y desprenderse de esas acciones negativas y nocivas.
Es de vital importancia hablar y conversar con el adolescente antes de ir a la primera cita con el especialista, ya que dependiendo de la edad, de la madurez y de la conducta se proporcionara toda la información necesaria al joven sobre lo que se va hacer o de lo que se pretende hacer.
Hay que hacerle ver y estar en cuenta que por lo que se esta pasando no es fácil pero que el recibir la ayuda facilitara aun más las cosas y aligerará mas las cargas y el peso que se tiene sobre los hombros. Hay que hacerle ver y entender al joven que el problema no es el o no es solo de él, que la familia esta tan involucrada con el proceso y quiere ser parte de ello para ayudar a superar lo que se está presentando.
La ayuda no es sinónimo de debilidad, más bien todo lo contrario es sinónimo de llenarse fortaleza y de estar en mejor situación, es importante hacerle entender al adolescente que estos especialistas no resuelven los problemas, sino que ellos trabajan sobre las fortalezas de cada persona ayudándolos a manejar y superar sus propios problemas.
En la preadolescencia
Existen varias clasificaciones de la etapa de crecimiento de un joven y con ella una serie de cambios físicos propios de la adolescencia, es un tránsito, es el segundo crecimiento y el más importante que experimenta el individuo.
A partir de los 8 años comienzan una serie de cambios en el individuo que no son perceptibles pero si están sucediendo, se empiezan a manifestar inquietudes o dudas típicas de esa edad y de ese proceso de cambios que casi obliga a los niños a comportarse como adultos, debido a que cada vez mas el periodo de la adolescencia se alarga mas y mas.
Estas son etapas que deben ser tratadas y abordadas con mucho cuidado, ya que la preadolescencia no es un proceso fácil de afrontar debido a todos los cambios que se están gestando tanto físicos como emocionales, y es aquí en donde la familia debe jugar un factor determinante. Pero hay un punto importante e este aspecto de la vida, para que se pueda entender la etapa de la preadolescencia antes hay que entender a los padres quienes son los que van abordar esta faceta de vida de sus hijos.
Es inevitable detener el crecimiento de los niños, ellos van a dejar de ser bebes y en un abrir y cerrar de ojos se van a convertir en niños y van a pasar inmediatamente a ser adolescentes, pero este proceso tiene su preludio desde que el niño o la niña esta en los 8 o 9 años de edad, se está ya en una preadolescencia, en donde ellos van sintiendo los cambios que su cuerpo está experimentando.
Se dice que el inicio de la preadolescencia se ubica entre los 8 y 9 años y se extiende hasta los 13 años aproximadamente, es aquí en donde se presentan no solo los primeros cambios físicos evidentes y químicos al interior de su organismo con el derroche de hormonas, sino los cambios en el carácter y el comportamiento del niño.
En esta etapa los niños prefieren la compañía de los jóvenes de su edad y dejar de lado la compañía de las niñas, ellas igualmente prefieren y se inclinan por la compañía de sus iguales dejando relegado a los varones a un segundo plano, es en este punto cuando se empieza a generar lazos de amistad y compartir intimidades y secretos que se tienen.
Ya en la preadolescencia se empiezan a dar los primeros síntomas de separación de los hijos y los padres, ya las reuniones familiares y esas demostraciones de afectos y cariños no son tan efusivas, corrientes y frecuentes, esta situación no se presenta vertiginosamente sino se va dando de manera gradual, cual es la recomendación en estos casos, actuar con paciencia, con mucho tacto y sobre todo con cariño para poder superar esta etapa con éxito y sin altercados o problemas.
Aun en los inicios de la preadolescencia hay una sensación de dependencia de los hijos hacia los padres, acuden a ellos en busca de consejos y recomendaciones, y es en esta fase en donde se debe explicar a los niños los cambios que su cuerpo va a experimentar, lo que va a ir sintiendo y de cómo se va a ir preparando para convertirse en un adulto.
Es fundamental explicar todo este proceso con naturalidad y sin complejos, de un momento a otro los varones crecen y se estiran, empiezan a aparecerle vellos en algunas partes del cuerpo, el olor cambia, la voz cambia y el molesto acné aparece en escena causando malestares incluso hasta complejos.
En el caso de las niñas los cambios y las transformaciones son más evidentes, por ejemplo crecen los senos, su figura corporal cambia, igualmente el olor corporal cambia y la voz, aparece en ellas también el acné, el vello en algunas zonas del cuerpo se hace presente y llega la primera menstruación.
Es necesario en el momento de la aparición de los cambios o incluso antes de que esto suceda explicarle que se deben aceptar estos cambios de la mejor manera posible, que es parte del crecimiento y del desarrollo, ya que esto significa que se está pasando de niña a mujer y que otros cambios también intervendrán en este tránsito de vida.
En la adolescencia temprana
Los cambios físicos en la adolescencia se manifiestan de varias maneras y en distintas escalas, ahora el adaptarse a esos cambios que se están experimentando con una debida asesoría es lo más sano para ese joven que se cree de otro planeta.
En la adolescencia temprana no sólo se experimentan cambios físicos, sino también, psicológicos, emocionales y sociales, la pubertad es el inicio de otra serie de cambios internos como lo son los hormonales por ejemplo que darán paso a otros más evidentes y notorios en el joven. Puede que se presente episodios de preocupación en los adolescentes por los cambios experimentados y de cómo los otros los ven y los perciben.
La vulnerabilidad del joven es muy alta y pueda que sea víctima de presiones de su grupo de amigos por iniciarse en el consumo de drogas, alcohol o actividades sexuales que podrían desencadenar o bien sea embarazos precoces o el contagio de alguna enfermedad de transmisión sexual.
Otros problemas que pueden enfrentar los adolescentes tempranos son los trastornos vinculados a la alimentación, la depresión es otro ingrediente que se suma a la lista de calamidades por las cuales pueda estar atravesando el joven, las dificultades en el aprendizaje y los problemas del núcleo familiar son aspectos a considerar en esta etapa de su proceso de crecimiento y de cómo lo afecta.
En este periodo ya están preparados o se sienten preparados para tomar decisiones sobre con quien se junta o elegir el grupo de amigos, sobre que deporte practicar, sobre los estudios y la escuela, se vuelven más independientes, desarrollan personalidad y criterio propio en base a sus intereses y de lo que es beneficioso para ellos.
A pesar de que a veces sienten la necesidad de tomar otra serie de decisiones sin ayuda o consulta de algún adulto, los adolescentes tempranos aun siguen necesitando de la ayuda, de la guía y del sostén de los padres en algunas elecciones trascendentales e importantes.
Como se puede brindar apoyo al joven en esta etapa, pues muy sencillo, involúcrese con él en las actividades escolares y muéstrele y hágale saber que está ahí y que puede contar con usted. Ayúdele a encontrar actividades extracurriculares a parte de las académicas y que despierten y sean de su interés.
Si ve que el joven tiene problemas o dificultades en el desempeño de sus actividades escolares, bríndele ayuda, búsquele un tutor o un especialista que le pueda socorrer y así aumentar el desempeño del joven en clases. El transito del colegio a un liceo o de primaria a un ciclo más avanzado representa miedos, estrés e inseguridades ayúdelo a entender que es una etapa de mayor esfuerzo y responsabilidad, pero que se debe asumir con normalidad.
Este atento de que las cargas académicas no afecten el desempeño de otras actividades que tenga el joven y que pueda equilibrar las cargas y que no se vea sobrepasado por una o por otra y que pueda compartir el tiempo para ambas actividades, sin abandonar alguna. Asígnele horarios y que aprenda a distribuir el tiempo entre sus obligaciones académicas y sus otras actividades.
En cuanto al desarrollo social y emocional, en esta etapa muestra una preocupación creciente por su aspecto físico y su apariencia personal, más que por cualquier otra cosa, es fácilmente manipulable por su grupo de amigos, es menos afectuoso, se muestra más irritante, temperamental y descortés.
Se preocupa a veces por los requerimientos y exigencias escolares, se sabe que está siempre en una situación de riesgo por las conductas que asume, por tanto y cuanto le corresponde en muchos casos tomar el papel de adulto y asumir ciertos roles de esta edad. Es muy común y usual su distanciamiento de los adultos, por sus ideas y escala de valores ante aspectos fundamentales de la vida.
Desarrolla una capacidad cognitiva de pensar de manera abstracta, expresa mas sus sentimientos al exteriorizarlos y hablar de ellos, está más claro y sabe diferenciar el bien del mal. Ahora por el lado físico crece rápidamente en estatura y peso, aparecen los vellos en distintas partes del cuerpo, la voz cambia y los genitales aumentan de tamaño.
En cuanto a las niñas en su aspecto físico le crecen los senos, aparecen igualmente vello en determinadas zonas del cuerpo, cambia también la voz y aparece la primera menstruación a menarquía, aparece el acné en ambos casos, el cuerpo crece y se desarrolla de manera no sincronizada lo que hace ver o parecer al adolescente algo deforme.
En cuanto al desarrollo sexual, es aquí cuando el adolescente se preocupa mucho y le dan un valor extremadamente alto a su cuerpo, a su apariencia, a como se ve y a como es percibido por los demás, el autoestima juega un papel importante y fundamental, crece la relación de independencia de los padres y de establecerse en grupos de iguales, con las mismas necesidades y los mismos deseos.
Al momento de hablar con un adolescente se debe ser preciso y ayudarle a expresar sus sentimientos sin que sienta que están siendo juzgados, así se le dará un control de su vida pero más responsable, sobre todo en el área de la sexualidad, que es tan delicado y tan importante.
Ahora bien el joven considerado un adolescente temprano puede llegar a sentir presiones de su entorno y de sí mismo por el hecho de creer que todo lo sabe, pero resulta ser que el aun se siente perdido, es de vital importancia seguir brindando ese apoyo y esa ayuda al adolescente, es necesario que el sienta que puede contar con sus padres y que ellos están allí para cuidar de el de su bienestar de su salud y de todos los aspectos de su vida, así se crea independiente de todo y de todos.
Escuche con atención y vea las actitudes de su hijo, obsérvelo como se expresa, como se comporta y como se desempeña, al estar informado ambos se sienten que están en sintonía y actualizados de su entorno y de las tendencias, ahora bien si el adolescente posee un sentido positivo, claro y orgulloso sobre su propia sexualidad, tenga la seguridad de que este tomara decisiones mas acertadas, responsables y mucho mas cuidadosas.
Cambios físicos, biológicos y psicológicos en la adolescencia
Es muy interesante las diversas etapas de los cambios que se van gestando en la adolescencia tanto los físicos, como los biológicos y los psicológicos y cada quien los manifiesta de manera distinta y eso dependerá incluso del genero y de muchos otros factores.
Más allá de los cambios físicos que los hemos abordado de sobremanera y hasta la saciedad en este articulo pero que no dejaremos de lado y que solamente reforzaremos algunos importantes y destacados, no son menos importantes los cambios y las transformaciones emocionales, biológicas y psicológicas en la adolescencia.
Esta es una etapa difícil, convulsionada y critica en donde afloran todos los sentimientos y emociones y si a eso le sumamos que se está en la búsqueda de una identidad que aun no se sabe cuál es y si a eso le colocamos un ingrediente adicional como lo es un embarazo precoz, los cambios se tienden a acentuar aun mas.
Un momento crítico en la vida de la adolescente es cuando se entera que esta embarazada y es allí en donde se le plantea el dilema de su vida, si decide continuar con el embarazo hasta completarlo o simplemente lo interrumpe, si la decisión es continuar, ella experimentará una serie de cambios en el organismo y sentimientos encontrados que le afectaran en su entorno familiar.
Las relaciones con sus padres se verán afectadas y trastocadas, seguramente y muy probablemente tendrá que interrumpir sus estudios, y todo eso sin tan siquiera imaginar todas las demás complejidades y vicisitudes que tendrá que enfrentar ante las responsabilidades que le tocaran asumir, para el cuidado de un bebe que no es nada fácil.
Otro momento el que se puede considerar critico es el momento del parto o los días cercanos a este, es aquí en donde el apoyo de los familiares más cercanos se hace más necesario, por ejemplo los padres de la pareja si aun esta en ese momento o los amigos que ayudaran a enfrentar con éxito esta situación.
Ejercer una función de doble rol a una edad tan temprana significa riesgos y sentimientos encontrados, por un lado se sigue buscando esa identidad que aun no se ha encontrado y que esa preocupación paso a un segundo plano por dedicarse a la maternidad y por otro lado el asumir la responsabilidad de ser madre y de ahora cuidar de una vida de manera seria y responsable, ser madre y adolescente al mismo tiempo no debe ser una tarea fácil.
Ahora bien por el lado de los cambios físicos que experimenta el adolescente están: aumento de la estatura, del peso y la talla, se ensancha la espalda y los hombros, se disipa la grasa del cuerpo, se activan las glándulas sebáceas y las sudoríparas por eso aparece el acné y cambia el olor corporal, cambia la voz, aparecen los vellos, crecen los genitales, la piel de los pezones y los genitales se oscurece y se presentan las primeras poluciones.
En al caso de las chicas ellas también aumenta de estatura, sus caderas se ensanchan y la grasa corporal se aloja en sus caderas y muslos, se cuerpo se torna más curvilíneo, se activan también las glándulas sebáceas y sudoríparas por ello aparece el acné y cambia el olor corporal, la voz tiene un tono más fino y agudo, crecen los senos y aparecen los vellos en el cuerpo, crecen los genitales y la piel de estos y de los pezones se oscurece un poco.
Psicológicamente hablando el adolescente toma más conciencia de sí mismo y tiene un mayor control emocional, se incrementan el deseo de independencia y libertad, pierde la confianza que le tenía a la familia empieza a sentirse extraño y raro en el mundo, es por ello que su comportamiento se vuelve más susceptible, iracundo y arrogante.
En esa búsqueda de autonomía es que el adolescente se embarca en la búsqueda de nuevas experiencias y de ahí se desprenden los riesgos y los peligros por los cuales atraviesa el joven, esa experimentación es la más peligrosa incluso para su propia vida.
Crecimiento y cambios físicos en la adolescencia
Los cambios físicos en la adolescencia está marcado por el crecimiento y la transformación de muchos de los aspectos del joven uno de ellos es la talla y las medidas que se empiezan a definir para darle paso al nuevo hombre o a la nueva mujer que está experimentando una etapa vital.
La adolescencia es una etapa de la vida que se ubica en la segunda década de nuestra existencia esta se pasea desde la infancia, pasando por la juventud, la adolescencia, la adultez y finalmente la vejez, ahora la edad adulta posee la misma importancia que las anteriores ya que aquí también existen características y necesidades propias.
La adolescencia según el autor, el especialista o la ubicación geográfica define a la adolescencia como un periodo de una tormenta emocional y hormonal, pues en la pubertad la expulsión de hormonas por el organismo es lo que provoca todos los cambios biológicos, psicosociales y sexuales que se experimentan en esta etapa de la vida. Es un periodo de oportunidades evolutivas para el desarrollo y establecimiento de una verdadera autonomía.
Pero para llegar y entender los cambios físicos en la adolescencia hay que comenzar a entenderlo desde la pubertad, que no es otra cosas sino la maduración completa de los órganos sexuales, así como el climax del desarrollo óseo o el comienzo para ello, así como de grasa y musculatura, lo que proporciona un crecimiento en la talla y el peso, que definirá la composición del adulto.
Ahora la adolescencia viene del verbo adolecer que significa también imperfección, lo que se traduce en crecimiento y maduración, aquí se presentan intensos cambios sociales, emocionales, psicológicos, físicos y sexuales. El establecimiento de los tiempos para definir la adolescencia para mucho es impreciso debido a los establecimientos tempranos de la pubertad y alargamiento de los periodos de formación escolar y profesional.
Por ejemplo para la Organización Mundial de la Salud (OMS) define la adolescencia entre los 10 y los 19 años de edad, y la juventud entre los 19 y los 25 años, mientras que la Sociedad Americana de la Salud y Medicina de la Adolescencia (SASMA) establece la adolescencia entre los 10 y los 21 años de edad.
Ahora bien esta misma organización clasifica la adolescencia en tres etapas o periodos cronológicos muy bien definidos y establecidos por ellos, los cuales son: la adolescencia temprana que va desde los 10 a los 14 años, la adolescencia intermedia que se establece entre los 15 y los 17 años de edad y la adolescencia tardía desde los 18 hasta los 21 años.
Los adolescentes pertenecen a un subgrupo de la población muy importante, no sólo por el número que representan, sino por varios factores tales como poder adquisitivo, capacidad reproductiva, en términos de salud pública, en cuanto a su comportamiento y sus hábitos todo esto tendrá una repercusión en su vida y en su salud adulta.
Como ya hemos dicho anteriormente la adolescencia es una etapa de riesgos para el individuo por lo que está expuesto a sufrir accidentes incluso mortales, a la violencia de su entorno, a la delincuencia circundante, al consumo de drogas y la ingesta de bebidas alcohólicas, experimentación de conductas sexuales muchas veces indebidas y riesgosas, problemas familiares, académicos, en cuanto al acceso a las tecnologías incluso problemas mentales, entre otros trastornos, aunque vale la pena destacar que la mayoría de estos son total y absolutamente previsibles.
En la adolescencia se encierran muchos mitos en cuanto al desarrollo y crecimiento biológico y psicosocial del individuo, cada joven es una individualidad, aunque a veces sean tomados sólo como un grupo homogéneo de personas, y lo que no se toma en cuenta es que los aspectos biológicos ejercen su influencia por sobre los aspectos psicológicos, por ejemplo cuando el desarrollo es temprano o tardío esto tiene una importancia capital para el joven, ya que le presenta problemas de adaptación y autoestima.
La adolescencia no se puede tomar como un proceso uniforme, continuo y sincrónico, ya que esto no es así del todo, puede tener adelantos, retrocesos incluso estancamientos sobre todo en momentos de mucho estrés además que se presenta en los distintos aspectos biológicos, intelectuales, sociales, y emocionales por los que este atravesando el adolescente.
Para la SASMA la clasificación de la adolescencia se presenta de tres maneras esta son:
La adolescencia temprana o inicial y se estableces desde los 10 a los 13 años de edad y esta marcada por los primeros cambios propios de la pubertad.
La adolescencia intermedia comprende los jóvenes de 14 a 17 años de edad, aquí empiezan los problemas entre padres e hijos y la influencia de los amigos es notable, y es también aquí cuando están más vulnerables y propensos a situaciones riesgosas.
La adolescencia tardía que se ubica entre los 18 y los 21 años de edad se asumen responsabilidades ya con un grado mayor de madurez, se reasumen los valores paternos y se aceptan con más libertad las tareas asignadas.
Durante la adolescencia se logra un desarrollo físico y se han alcanzado los objetivos psicosociales, es decir, ya se acepta con mayor libertad la imagen corporal, se establece una identidad y se establecen de manera exitosa relaciones con amigos.
Los mitos que encierran la adolescencia se fundamentan en un profundo desconocimiento a pesar de que todos pasamos y experimentamos esos altibajos emocionales y conductuales, pues bien se define en muchos casos como un periodo de inestabilidad y turbulencia emocional, de pensamiento irracional incluso se llega a creer y decir que es una etapa de psicosis temporal que afortunadamente se logra superar exitosamente.
Es un mito decir que el adolescente atraviesa por un periodo tormentoso y tumultuosos en su vida, no existe soporte científico que demuestre que esto es así, lo que sí está demostrado que el 80% de los adolescentes tiene buenas relaciones con sus padres y demás familiares, trabajan y estudian y muestran interés por valores sociales y comunitarios.
Otro mito es que padece de una gran emotividad descontrolada, lo que si se sabe con certeza es que existe una notable diferencia entre la emotividad de los niños y la emotividad de los jóvenes, lo que si es cierto es que el adolescente muestra signos de animosidad alterada producto de las responsabilidades académicas y laborales establecidas.
Es otro mito creer o hacerse eco de las aseveraciones que establecen que los adolescentes son irracionales e infantiles, vale la pena destacar que en el crecimiento se pasa de un crecimiento concreto a un pensamiento abstracto con proyecciones a planes futuros, mostrando síntomas de madurez, a los 12 años se alcanza un desarrollo cognitivo con la suficiente capacidad para pensar en abstracto y entre los 15 y los 16 ya se diferencia el bien del mal.
Pero no es sino entre los 25 y los 30 que se alcanza la madurez definitiva cuando los mecanismos neurofisiológicos y se puede discernir lo que conviene y lo que no conviene hacer. Esto también explica porque el joven está en constante riesgo, ya que el adulto tiene una conexión cerebral entre lo emocional y lo racional, lo que le permite dar respuestas adecuadas.
La adolescencia es un desarrollo emocional progresivo, existen inestabilidades que son superadas, y la formación gradual de la identidad mas por incapacidad que por otra cosa, es por ello que es importante saber en que terreno se está y poder identificar los verdaderos problemas patológicos y buscar el tratamiento adecuado si es que hubiese necesidad de alguno.