La adolescencia está en una etapa media entre la niñez y la adultez, en la que el individuo vuelve a crecer y se prepara para una vida más responsable, pero mientras eso pasa, se está en un tránsito en donde los cambios psicológicos de la adolescencia hacen de las suyas en la mente del joven que aun no sabe que es.
¿En qué consisten los cambios psicológicos en la adolescencia?
La adolescencia es una etapa difícil y de muchos conflictos para alguno es algo larga para otros algo corta pero de los que si se debe estar seguro es que todos hemos pasado y experimentado esos cambios psicológicos que muchas veces atormentan.
Desde el punto de vista psicológico la adolescencia es una etapa de cambios importantes y transcendentales para el joven, aquí es donde se está enfrentando a esa etapa de su vida de grandes cambios para el desarrollo de su personalidad e identidad. Estos cambios logran afectar distintos niveles de su comportamiento, pero va a marcar decisivamente su inclusión en el mundo adulto.
En esta etapa de la vida se van definiendo y moldeando nuestros comportamientos que serán definitivos para nuestra incursión en una vida adulta, aquí también aparecen nuevas y otras interpretaciones de cómo debemos comportarnos antes ciertas y determinadas situaciones, los que nos preparará para una vida adulta y asumir ciertas acciones más apegadas a la realidad que nos rodea. (Ver artículo sobre Familia Ensamblada)
Los cambios biológicos van acompañados de los cambios psicológicos estos van de la mano aunque a veces se piense que van uno desprendido del otro, pero no es así lo que pasa en nuestro cuerpo incide en nuestra mente y viceversa. Nuestra especie debido a su naturaleza social emplea el conocimiento que se tiene o se ha obtenido para determinar nuestras formas y maneras de comportarnos en función de los cambios que se van experimentando.
Existe algo denominado herencia cultural que es los que nos va a permitir poder llevar una vida independiente cuando nuestro cuerpo, nuestra mente y las posibilidades así lo determinen y conformar de esta manera nuestro núcleo familiar.
La herencia cultural nos da la posibilidad de adquirir habilidades que nos dan ciertas capacidades relativas para el cuidado de lo propio y el mantenimiento de lo material, se establece una independencia emocional con relación a los adultos, hay una elaboración mas especifica de las relaciones interpersonales y se empiezan a formar las escalas de valores que son las que determinaran el comportamiento.
La adolescencia entonces se puede entender como un proceso evolutivo del ser humano que puede durar mas o menos entre seis y diez años, es una faceta natural específicamente social y psicológica entre dos mundos que son el infantil y el adulto y en el medio están todos los cambios que se gestan en el ser y que lo transforman en lo que se convertirá en el futuro.
Desde el punto de vista psicológico lo más importante del ser en esta etapa es que va conociendo se va inmiscuyendo y se va progresivamente accediendo al conocimiento de lo que es y significa la autonomía de la persona.
Ahora bien cada vez que un adulto se esté relacionando con un adolescente se deben comprender con claridad los cambios definitorios que se están produciendo en él y entender por lo que está pasando sin juzgar u omitir otros juicos de valor más destructivos. Esta etapa es trascendental para ir definiendo un proyecto de vida pero sobre todo definir la identidad personal que será la marcada en la adultez.
Ahora cual debería ser el trabajo o el enfoque del adulto con el adolescente en este periodo, acompañarlo y guiarlo de la mejor manera posible en ese proceso de libertad y autonomía personal que quiere experimentar. Hay que afrontar esta etapa positivamente porque ciertamente no es fácil para nadie, ni para el que la esta transitando ni para el que la este percibiendo desde afuera.
Existen muchos prejuicios que rodean la adolescencia y los conflictos que se presentan en esta fase dependerán en gran medida del apoyo que se tenga de la familia, de cómo esta afronte la situación, del entorno en donde se esté desenvolviendo el joven, de las condiciones personales y de los recursos disponibles para tratarlo como se debería.
¿Qué se puede recomendar en estos casos?, lo primero que se debería de hacer es establecer normas que ayuden a delimitar como se deben relacionar con los otros de manera que no afecten las relaciones interpersonales, brindar apoyo emocional e ir de la mano con el joven para resolver los problemas, retos y conflictos que se vayan presentando sobre la marcha. (Ver artículo sobre Familia Homoparental)
Se debe apelar también a la inclusión en la variedad de los contextos sociales, y tratar de entenderlos, para que así se pueden ofrecer los soportes necesarios y el estimulo al desarrollo sano de la autonomía del adolescente.
De esta manera se pueden lograr transiciones positivas a una vida adulta, no es recomendable y se deben descartar las posturas excesivamente rígidas que no aporten un sustento real y una orientación sana en el tránsito de la adolescencia.
Esta más que demostrado que los modelos de crianza basados en el fomento de la autonomía, el afecto, la comunicación son más efectivos y se logran mejores resultados en la que los adolescentes son más apacibles y menos conflictivos.
La idea y el pensamiento de que cada vez son menos ingobernables los adolescentes es una percepción que se van transmitiendo de generación en generación, pero lo que siempre se va a mantener es la esencia rebelde del adolescente que siempre lo va ser es su estado natural, siempre va a ver al mundo con egocentrismo y va actuar como si supiera de todo en cuanto a lo que lo rodea pero carece de una aspecto fundamental para enfrentar la vida que es la experiencia.
Una manera de solapar sus miedos e inseguridades es con esa actitud de omnipotencia y superioridad, tratando al mismo tiempo de buscar ese reconocimiento social, eso los lleva a exteriorizar lo que decíamos anteriormente la vena rebelde que los lleva a cuestionar las figuras de autoridad tanto la de los padres como la de los maestros, lo que puede generar momentos de tensión sobre todo en el hogar.
Es importante entender al joven, porque ya el adulto también paso por esa etapa, que es lo más recomendable empatizar con él y buscar las mejores relaciones minimizando así los conflictos, para brindar la mejor educación y no hay que olvidar que es solo un período de tiempo que no se va a prolongar por mucho.
No ha que olvidar de enseñar, transmitir y corregir las cosas que están mal, reforzar las que están bien y las que son correctas pero no hay que excederse en las posturas represivas, ya que estas pueden marcar un hito entre el antes y el después de las relaciones entre los padres y los hijos.
Hay que establecer los límites y dejar claro que se permite y que no, que está bien y que no, que se puede hacer y que no, dejar claro quién tiene la autoridad y no dar su brazo a torcer, se trata de establecer límites razonables y justos por el bien de la convivencia y por el bien del joven aunque él no lo verá así nunca.
Hay que saber demostrar que existe una verdadera empatía y que son capaces los padres de comprender las necesidades de los jóvenes en esta etapa de su vida, porque de lo contrario podrán ser vistos o percibidos como un enemigo, lo cual no es nada bueno, ni nada sano.
Para que se pueda lograr una verdadera comprensión de las razones de los adultos en los adolescentes hay que ver el mundo desde su perspectiva, saber que es lo que le molesta y las razones de eso, su percepción no es siempre la que se está presentando en la realidad y es ahí cuando debe intervenir el adulto en ese proceso de guiar de la mejor manera posible sin molestarse, sin gritar y sin prohibir.
Es importante darles el poder de decidir así aprenderán si se equivocan, porque lo mas dañino también son esas posturas y actitudes sobreprotectoras que no llevan a nada bueno porque no están dejando al joven experimentar y conocer del mundo tal cual es y de los retos que se le deben plantear para que ellos puedan desarrollar la capacidad para resolver esos problemas planteados.
Características
La estructura psicológica del individuo cambia radicalmente en la adolescencia, se destapan y afloran características propias de la etapa y de ese proceso de transición de niño a adulto.
En la adolescencia el joven va descubriendo su verdadera identidad, la que lo va a definir en el futuro como un adulto, se va descubriendo a si mismo aunque hay episodios de ambivalencia entre dejar de ser un niño y comenzar a ser un adulto de verdad.
Se despiertan sentimientos de inseguridad ante los cambios que se están generando y no se les consigue explicación, esa inseguridad la va a exteriorizar en egocentrismo y rebeldía ante lo desconocido, es la mejor manera de blindarse ante lo que está pasando, otro aspecto que también exteriorizan ante la inseguridad es la agresividad en su accionar, aunque esto muchas veces lo hacen de manera inconsciente.
El narcisismo y el llamar la atención son otras de las facetas u otra de las características que manifiesta el adolescente, en esa búsqueda de identidad constante al querer decirle al mundo que como él no hay nadie.
Ante la constante incertidumbre de saber exactamente cómo actuar, que creer y que pensar sobre lo que le está sucediendo, se presenta la necesidad de buscar grupos de iguales y grupos de apoyo, que no es otra cosas sino jóvenes en las mismas circunstancias que se apoyan unos a otros ante las inseguridades presentes y las amenazas de los adultos.
El comportamiento de los adolescentes mayoritariamente obedece a una sola razón fundamental que es saber los límites de los adultos, saber hasta dónde llegar y hasta donde hacer, es por ello que siempre están tentando y andan en esa frontera constante de retos y desafíos a la autoridad y a las reglas y normas establecidas.
Existen características físicas asociadas a ciertas implicaciones académicas o educativas por ejemplo en el caso del incremento en el peso y la estatura es importante realizar algún tipo de actividad física para prevenir los desordenes alimenticios como la obesidad.
Es muy importante en esta etapa la apariencia y el aspecto físico, es por ello que involucrar al joven en actividades que lo ayuden a conocerse y a aceptarse a sí mismo, lo que proporcionara confianza y elevación del autoestima.
Hay un riesgo latente que es el consumo de drogas o cualquier tipo de sustancia por lo que ante esto hay que brindar y ofrecer toda la información y la educación al respecto para prevenir posibles episodios de adicciones y resultados que nadie quiere.
Psicológicamente hablando se van a presentar episodios en las que las reacciones van a ser descontroladas e imprevistas, eso se debe a los cambios de humor propios de la adolescencia, que se puede mostrar una actuación estable y equilibrada y no colocarse al nivel del joven porque lo que provocaría es agravar la situación.
Existirán episodios en los cuales el ánimo estará oscilando entre ínfulas de superioridad y de inferioridad, en los que se creen que son los dueños del mundo y que se las saben todas y en otros en los cuales exista una actitud de ensimismamiento y timidez que los hará ver irreconocibles. Aquí el autoestima será determinante para equilibrar estos estados anímicos característicos de la adolescencia.
Se presentan episodios de aumento de la memoria significativa lo que hace que el joven actúe de una manera más constructiva y activa de su realidad.
Ahora bien, socialmente se generan las ganas de ser independiente, lo que lleva al adolescente a trabajar en su autonomía como individuo y establecer su propia identidad que es la que marcara la pauta en su futuro y en su vida adulta.
Las actitudes rebeldes, desafiantes y las desobediencias son en muchos casos comunes en la adolescencia son cualidades en muchos casos aprendidas a través del grupo de amigos por la alta influencia que estos ejercen sobre los jóvenes, ya que entre unos y otros se comparten experiencias y de ahí se nutren y se retroalimentan.
Mas entrar a la adolescencia, es decir, en su fase final y mas cercana esta de la etapa adulta se van definiendo lo que son las preocupaciones por el futuro, el trabajo y la vocación, lo que los lleva a planificar mejor su vida y sus carreras, en función de los intereses reales y ajustados a sus necesidades y aspiraciones. (Ver artículo sobre Familia Disfuncional)
Del hombre
Se considera la adolescencia como un proceso psicológico vivencial que se inicia o tiene su punto de partida con la aparición de caracteres sexuales secundarios porque ya los cambios bilógicos y físicos existen.
Los retos de la adolescencia en esta etapa es la búsqueda de la identidad, pero no se logra conseguir eso de la noche a la mañana, se tienen que pasar por una serie de procesos psicológicos y emocionales los que son de gran contradicción para el ser en esta parte de su vida.
Las emociones encontradas o contrapuestas y en muchos casos contradictorias son las que marcaran la vida del adolescente hasta que logre definir realmente una identidad que será la que lo marcara como un individuo adulto y lo llevara a ese reconocimiento por parte de sus iguales en el entorno en donde se vaya a desenvolver.
En ocasiones se mostrará alegre porque se cree adulto pero al mismo tiempo desarrollará angustias e inquietudes al ver que tiene que afrontar otros retos como los son los cambios físicos y los cambios bilógicos.
Presentan tendencia a ser temperamentales y con mal humor, además son impulsivos y desordenados, aunque no en todos los casos, pero la ansiedad si la van a tener en todo momento, lo que les va a despertar sensaciones de protección ante esto que es desconocido.
Es normal que pasen de estar alegres a estar tristes o deprimidos, estas alteraciones en los estados de ánimo son recurrentes en unos y en otros, hay momentos en los que se creen superdotados e inteligentes y otros en los que se sienten totalmente estúpidos.
Hay un temor absoluto por hacer el ridículo, por lo que evitarán sobresalir delante de los demás, pero van a querer llamar la atención en frente de sus amigos con la intención de generar empatía.
Para muchos expertos del área social conductual la adolescencia es una etapa de un nuevo crecimiento y en donde se esta aprendiendo a crecer por segunda vez ahora de manera consciente.
Hay una necesidad de intimidad y que guardan con mucho celo sobre las cosas que hacen, piensan o creen y ante cualquier pregunta por más simple o rutinaria que sea sienten que están invadiendo su espacio y si intimidad. Es por ello que aquí dejan de compartir experiencias con los padres.
En este proceso tienen la necesidad de tener su propio espacio, y cualquier alteración de esta rutina o que sientan que están sobrepasando los límites de su entorno privado, puede generar alteraciones en el ánimo y en la conducta.
Así como es rebelde, también es egocentristas el centro del mundo y del universo, pero esta actitud es válida, ya que aquí se están formando los lazos emocionales para conseguir su verdadera identidad.
Es un error muy común o un lugar común que los demás están pensando en ellos, lo que los lleva a imaginar que siempre se está hablando de ellos, para bien o para mal, provocando en muchos casos discusiones innecesarias por algo que no sucedió.
Es importante estar o pertenecer a un grupo social determinado que comparta sus mismos intereses y que no solo puedan pertenecer sino que también se sientan aceptados por ese grupo y ese entorno.
Esa necesidad de encajar les abrirá las puertas a establecer nuevos lazos sociales con sus iguales, lo que no es malo del todo, lo que sí podrían traer consecuencias es a que grupo se está uniendo y las tendencias de ese grupo.
En los amigos no sólo ven pares o iguales, los ven y los perciben como aliados valiosos y efectivos para enfrentar ese nuevo mundo que están descubriendo, y que esa exploración la podrán superar con alguien que quizás comparta sus mismos miedos pero que la enfrentaran juntos.
En muchas ocasiones el no ser aceptado o no encajar en un grupo los hace ver inferiores, poco valiosos, lo que disminuye su autoestima y los sentimientos son de tristeza e infelicidad.
Los amigos son un grupo fundamental en esta etapa de la vida, porque mas allá de brindar apoyo ante los retos y desafíos de la adolescencia y compartir los mismos códigos, logran ejercer una gran influencia en todos los sentidos, logrando ocupar un lugar privilegiado en la escala de valores, incluso por encima de la familia.
Es una etapa de riesgos, porque es aquí en donde se presentan las primeras experiencias con las drogas, el alcohol y cualquier otra sustancia que genera adicción, que los lleva a cometer locuras sin estar consciente de los riesgos y las consecuencias de sus actos, lo que los hacen tan vulnerables como peligrosos.
Hay una ruptura de la dependencia de los padres para ir consolidando su independencia, esa ruptura no solo es con los padres sino con todo el entorno familiar, ya que los amigos son un lugar común para compartir los mismos objetivos y las mismas necesidades.
Hay un convencimiento de que no necesita la ayuda y el soporte de los padres lo que los lleva a revelarse ante estos desafiando la autoridad, expresando rebeldía en sus acciones queriendo trastocar los límites impuestos y establecidos como normas esenciales de convivencia.
Expresan sentir y desear mayor independencia y libertad en su vida, lo que los lleva a buscar nuevas experiencias tantos excitantes como peligrosas, dejando los temores a un lado.
El aislamiento es parte de ese proceso de buscar esa privacidad que tanto desean y al verse trastocada, puede ser el punto de inicio y de partida para disputas y conflictos existenciales sobre la necesidad de que los entiendan cuando nadie lo hace y los únicos que pueden a llegar a comprender estos estados de ánimo son los grupos y los amigos.
Hay frases que son lugares comunes que pueden ser groseras y falta de respeto hacia los padres, maestros o alguna otra persona mayor que pudiera tener autoridad ante ellos, estas frases son por ejemplo “no te metas en mi vida”, “déjame vivir mi vida”, “tú no sabes nada”, “eso es cosa de jóvenes no de adultos”, entre otras. (Ver artículo sobre Funciones de la Familia)
El reconocerse como hombre ya es un paso importante para buscar su propia identidad, siempre va a criticar todos los sistemas sociales que les incomoden o no le sean afín, por lo que se va a buscar recursos en otros modelos, tales como ídolos musicales o actores, influencers, entre otros.
Experimentan cambios ideológicos tan radicales y extremos que se vuelven difíciles de entender, a pesar de las consideraciones que se pudieran tener, hay cambios generacionales que son difíciles de asimilar y entender por algunos adultos.
Se empiezan a manifestar las conductas de atracción hacia el sexo opuesto y la apariencia física comienza a ser importante, ese como me veo o como luzco se vuelve lo principal.
Son una presa fácil a sufrir de trastornos alimenticios asociados a la belleza, la estética y a la apariencia como por ejemplo la bulimia o la anorexia por ese temor que se siente a engordar.
Los cambios hormonales son los que despiertan estos sentimientos de atracción hacia el sexo opuesto, estas nuevas sensaciones pueden generar, temor, alegrías y curiosidad.
Por las mismas respuestas hormonales y el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios se despierta la libido, por ello es esencial impartir charla y ofrecer información sobre el noviazgo, la sexualidad, las relaciones sexuales y los métodos anticonceptivos.
Hay otra serie de cambios en el interior del individuo que ocurren en el pensamiento por ejemplo se desarrolla un pensamiento formal, hipotético y reductivo, se razona ya un poco más y se deja la impulsividad de lado.
Muestra interés por problemas que nada tienen que ver con la realidad que le rodea, hay un desarrollo de una capacidad más crítica hacia las cosas, hay una escala de valores y de las consecuencias de esta a largo plazo.
Ya sabe cómo defender sus propias opiniones y posturas y las sabe defender a capa y espada, cuestiona con más vehemencia la autoridad de los padres y de las personas de su círculo que generan poder o autoridad.
De la mujer
Los primeros cambios se presentan entrada la pubertad, pero los cambios psicológicos en la mujer se manifestaran de acuerdo al grado de madurez de esta, es aquí donde empieza a experimentar con mayor curiosidad que en etapas anteriores.
Es una etapa en la que son muchos los aspectos psicológicos que comparten los hombres y las mujeres, guardando las diferencias en cada caso, pero comparten la sensación y la idea de encontrar espacios de intimidad.
Existe un mayor deseo de experimentación sexual y se incrementa el interés por conocer más experiencias placenteras, como la masturbación, la autogratificación, los sueños eróticos, las fantasías sexuales y la necesidad de descubrir esa primera relación sexual.
Los cambios físicos, inciden en los emocionales y estos en los psicológicos por ejemplo las mujeres pueden llegar a sentir vergüenza por el tamaño de sus senos, la forma o apariencia de sus piernas, la acumulación de grasa en su cuerpo y la aparición temprana o tardía del primer ciclo menstrual.
Cuando ya se cree que ya se habían terminado los cambios y se habían acostumbrado a estos, surgen otros, como por ejemplo la apariencia y el físico, las ganas y el deseo de poseer un cuerpo más atractivo y un acercamiento a las tendencias de la moda.
Aparecen estados de rebeldía y conflicto con los padres ya que desean acelerar el proceso natural de crecimiento y desean convertirse en mujeres, tienen etapas, momentos y episodios en los que se centran más en los estudios y no importa otra cosas que no sea lo académico, pero eso se revierte de un momento a otro y hay un interés más por la fiesta y la diversión que por los estudios.
Tienden a deprimirse con facilidad, por muchas subidas y bajadas de las emociones, eso se ve reflejado en el humor que cambian de manera drástica y frecuente, un día están bien alegres, al otro no se soportan y luego se sienten deprimidas y estallan en llanto sin motivo o razón aparente.
Presentan un autoestima extremadamente sensible victima también de los altibajos emocionales que mencionábamos anteriormente, hay días en que el atractivo las desborda y las sobrepasa, pero hay otros días en las que el poco atractivo las hace presa de sí mismas.
Son extremadamente sensibles a las críticas y se vuelven casi obsesionadas a estar siempre arregladas y perfectas, se interesan mucho por cómo se ven, como se ve su cuerpo y le dan una altísima importancia a su apariencia física.
Hay extremos en las conductas, por ejemplo unos días manifiestan extroversión pero hay días en que son presa de la timidez exacerbada, rayando en lo infantil. Aparecen las tendencias a la atracción por el sexo opuesto.
Se presenta o se manifiesta un aumento en la libido y cuando esto se presenta hay que tener muy en cuenta el acceso a la información sobre los riesgos, las ventajas y desventajas de los noviazgos de las relaciones entre niños y niñas y las relaciones sexuales sin protección, es importante hablar y tener en cuenta el conocimiento sobre los métodos anticonceptivos.
En la preadolescencia
La preadolescencia es una etapa en la que se está entre la niñez y la adultez, y es aquí en esta etapa en donde se comienza a gestar cambios hormonales y cambios psicológicos que va a representar las características definitivas de ese futuro adulto.
La preadolescencia marca el inicio de una etapa de construcción de esa identidad que aun no se tiene que se va a empezar a gestar y que será definitiva para el comportamiento final del adulto. Muchos son los cambios que se presentan en todos los niveles emocionales, físicos y conductuales.
Cada niño es una individualidad desde que nace, y como es lógico cada uno tendrá sus tiempos de maduración y de llegar a los procesos a los que tenga que llegar en su momento, según algunas estimaciones la preadolescencia se ubica en una edad cronológica entre los 11 y los 13 años de edad, pero hay incluso algunos que la sitúan un poco antes, es decir, entre los 9 y los 10 años de edad.
Pero ese es el tiempo en que aproximadamente se comienzan a dar los cambios físicos y biológicos producto de ese proceso de maduración natural en el crecimiento, pero es también cuando empieza a tener cambios conductuales y emocionales también propios del proceso de crecimiento.
Los cambios psicológicos asociados a la preadolescencia son muchos y por demás variados, cada niño lo refleja y lo manifiesta con mayor o menor intensidad, pero en líneas generales casi todos muestran los mismos síntomas.
En la medida en que se va creciendo van apareciendo nuevos miedos, como por ejemplo el miedo a hacer el ridículo o quedar en ridículo, aparece el pudor y la vergüenza para mostrar su cuerpo ante los otros, incluso a veces ante los padres, aquí se comienza a manifestar algunos problemas relacionados con la imagen corporal, por lo que se sugiere abordar en tema con mucho cuidado.
Se presentan los episodios en los que se quiere y se desea una mayor intimidad, se alejan de los padres e invierten más el tiempo en otras actividades que le generan más interés, como por ejemplo escuchar música o leer. Estas actitudes no deberían de llamar mucho la atención ya que eso ayudara a construir su propia identidad, además siempre y cuando no se rompan los lazos afectivos y comunicativos no hay nada de que preocuparse.
Hay la preocupación suprema de agradar sea como sea a los amigos, los amigos son la referencia para la construcción de los pensamientos, las actitudes, empiezan a manejar su propia jerga muy distinta a la de los padres.
Las fluctuabilidades en el ánimo son también normales que ocurran, ya que sienten que nadie los entiende o los comprende antes situaciones simples, pueden pasar de la alegría a la tristeza, para lo niños o todo es ideal o no lo es, están llenos de ilusiones que reflejan en las risas o en el llanto por situaciones poco ideales, hay incluso discusiones internas con su propio yo. Son momentos de grandes y profundos cambios que los padres deben saber asimilar y manejar.
Todos estos cambios o algunos de ellos pueden provocar conflictos en el hogar entre los hijos y los padres, lo que se debe dejar claro es que si para los padres no es fácil lidiar con estos cambios para el niño mucho menos, es por lo que se recomienda paciencia, apoyo y mucho dialogo y mucha comprensión.
Cambios biológicos, psicológicos y sociales
En la adolescencia se empiezan a dar muchos cambios entre ellos los biológicos, los psicológicos y los sociales, aparecen los primeros signos en la pubertad y se terminan ya entrando en la etapa adulta, incluso algunos a veces se siguen presentando.
La vida esta divida por partes o por etapas y los cambios ocurren en la adolescencia en la segunda etapa de la vida, la pubertad es un episodio fisiológico en el ser humano mientras que la adolescencia es percibida como un proceso socio cultural. Se estima que más del 60% de las sociedades en vías de desarrollo o pocos industrializadas no le colocan un término a la adolescencia, ni siquiera saben cómo llamarla.
La influencia occidental en estas culturas viene a traer problemas en la adolescencia que para ellos eran desconocidos y viene a sumarle otros a parte de los ya existentes en el propio proceso de la adolescencia.
Realmente la adolescencia se tiene que entender como un proceso de aprendizaje, un aprendizaje prolongado en el tiempo en el que se van adquiriendo durante este proceso estrategias y conocimientos necesarios para afrontar la vida adulta, no existe una relación entre el mundo de los adultos y el mundo de los adolescentes y al estar ambos separados y no relacionados en el proceso de aprendizaje se generan los conflictos.
Pero a pesar de todo esto los adolescente manifiestan o exteriorizan un comportamiento normal, es un periodo de gran efervescencia emocional de gran creatividad y elucubración de fantasías, es un momento de esplendor psicológico y físico, es compleja pero a la vez feliz en donde hay un desarrollo máximo de la capacidad congnitiva, agilidad, fuerza y memoria.
Los adolescentes surgen de los primeros códigos de la pubertad, es aquí en donde se van a despertar las hormonas que hasta ese momento se creían que no existían, para proporcionar al organismo de sustancias que van a cambiar o que van a contribuir a que aparezcan los caracteres sexuales secundarios, estos cambios tienen sus tiempos y no en todos los jóvenes se presentan de igual manera y siempre se dan primero en las niñas que en los niños.
La adrenarquia es el proceso que antecede la producción hormonal y se presenta en los niños entre los 6 y los 8 años de edad, las manifestaciones físicas de este despertar hormonal se manifiestan en niños y niñas casi de manera igualitaria, por ejemplo aparece en vello en distintas partes del cuerpo.
En ellos en piernas, axilas, pecho, cara y genitales, mientras que en ellas solo en piernas, axilas y genitales, se da el incremento de la secreción sebácea lo que aportara grasa corporal y la aparición del acné y el olor corporal se torna más fuerte, en las niñas son las responsables de una pequeña aceleración del crecimiento prepuberal y del crecimiento de la estructura ósea.
Durante la pubertad ocurren cambios químicos que se manifiestan en las descargas hormonales estos son: la reducción en la sensibilidad del hipotálamo y la hipófisis con una retroalimentación negativa de los esteroides sexuales lo que lleva a una maduración del sistema nervioso central.
La aparición de las características sexuales secundarias es los que marca definitivamente el proceso de maduración sexual en los adolescentes. Dependiendo de las características observadas se podrá determinar el nivel o el grado de maduración y su correspondiente edad cronológica.
La aparición del vello púbico, el crecimiento del pene, los testículos en ellos y de los senos en ellas son los hechos más evidentes en los cambios morfológicos corporales lo que da indicios claros de haberse convertido en un futuro ser reproductor, todo esto según los grados de desarrollo de la maduración sexual de cada individuo.
En el varón el comienzo del desarrollo sexual va desde los 9 a los 13 años siendo los 11 una edad media para este proceso, tres años es el tiempo estimado en el cual se demora un ser humano en completar la etapa de la pubertad.
En las niñas el botón mamario es el primer signo del inicio de la pubertad e igualmente se cree o se estima que puede darse entre los 9 y los 13 años siendo los 11 el punto medio de este desarrollo o del comienzo de esta etapa, resulta curioso que los momentos de desarrollo de la hija estén relacionados a los de la madre, también se asocian a las condiciones socioeconómicas, al clima y la raza. Aquí también se presentan cambios en los ovarios y en el tamaño del útero.
Las hormonas son las responsables del aumento de la talla, inciden en la velocidad del crecimiento y el fortalecimiento de la estructura ósea, ahora bien el crecimiento está vinculado a la actividad endocrina y al sistema óseo, estos trabajan de la mano para propiciar los cambios en la estatura y talla.
Durante el crecimiento en la etapa de la pubertad ese aumento de la talla representa el 25% de la talla de un adulto, eso quiere decir que durante la pubertad se crece la cuarta parte de lo que se va a medir cuando llegue a ser un adulto, este crecimiento dura de dos a tres años pero dependerá de cada individuo, ahora bien en las niñas el crecimiento puede variar y puede ir de 5 a 11 centímetros, mientras que en los niños varian de entre 6 a 13 centímetros. En las niñas el estirón comienza dos años antes que en los varones llegando a un pico para ellas a los 12 años y para ellos a los 14 años.
A los 14 años las hembras tienden a ser más altas que los varones pero estos llegan a ser más altos que ellas ya que su crecimiento se detiene mientras que el de ellos continúa por unos años más. En términos totales las niñas logran elongarse entre 20 y 23 centímetros, mientras que los chicos alcanzan unos 24 a 27 centímetros de altura.
Ahora hablando en términos de peso ellas tienden a aumentar entre unos 4 y unos 10 kg y los chicos entre uno 5 y 13 kg, ahora ellos tienden a ser más pesados por el desarrollo de la masa muscular que las niñas no desarrollan.
El tejido graso en las mujeres en más evidente que en los hombres, pero el tejido o la masa muscular en ellos es más prominente y notoria que en ellas, en el caso de las mujeres la pelvis se redondea y se ensancha, la estructura ósea es lo único que cambia igualmente en ambos unísonamente con los tejidos blandos.
Ahora bien en cuanto a los cambios psicosociales se presentan las dualidades entre dependencia e independencia y se comienza a gestar en el individuo en diferentes edades, la primera de ellas la que va desde los 12 a los 14 años, muestran un menor interés por la compañía de los padres, existe un vacío emocional y los cambios de humor son muy variables constantes y comunes.
Se empiezan a preocupar por su apariencia, por su cuerpo, se muestran inseguros en algunos caso de cómo se ven, hay un manifiesto interés por la sexualidad y el descubrimiento de esta etapa de la vida, a pesar de los miedos, temores e inseguridades que están asociadas a esta.
Se presenta la necesidad de buscar grupos de amigos o grupos afines que compartan los mismos intereses, los mismos ideales y los mismos códigos, las relaciones son mas emocionales que racionales y la interacción con el sexo opuesto es más marcada que en temporadas anteriores, en donde no existía ese interés.
El desarrollo de la identidad está asociado al pensamiento abstracto y al planteamiento de objetivos irreales para un futuro, hay un desafío claro a la autoridad, no hay control sobre los impulsos y la necesidad de tener una intimidad se hace necesaria.
El desarrollo psicosocial desde los 15 a los 17 años la relación de dependencia e independencia se torna mas conflictiva con los padres, ya existe una mayor aceptación por el cuerpo pero continúan ciertos delirios por la apariencia externa y el aspecto del cuerpo.
En cuanto a la integración con los amigos se fortalece y se intensifica en cuanto a las escala de valores, las reglas, la moda, la relación con otros grupos o con otras personas de la misma edad, comparten aficiones como los deportes, por ejemplo y otra actividades de entretenimiento y ocio.
Ya hay un desarrollo más sostenido de la identidad se presenta una mayor empatía, se incrementa la capacidad creativa e intelectual, las expectativas vocacionales están mas ajustadas a la realidad, se comienzan a evidenciar rasgos de egocentrismo, inmortalidad y omnipotencia los que los lleva a ser menos temerarios ante los riesgos y el peligro.
El desarrollo social del joven entre los 18 y los 21 años manifiesta una independencia de los padres haciendo cada vez más evidente, aunque no dejan de vincularse afectiva y sentimentalmente, ya existe una total aceptación por su cuerpo y la apariencia personal o las preocupaciones por esta pasan a un segundo plano.
Ya los amigos no son tan importantes como en las primeras etapas de la adolescencia lo que no quiere decir que se desvinculen del todo, ya se empiezan a relacionar con otras personas y hay una mayor comprensión ante las cosas.
Desde el punto de vista del desarrollo de la identidad se percibe una consciencia realista y racional ante las cosas, la vida y los problemas, se plantean objetivos vocacionales más prácticos ya hay una valoración más arraigada y consciente sobre la sexualidad y la religión.
La adolescencia es una etapa vital del ser humano de muchos cambios, subidas y bajadas, los cambios y las transformaciones y darle un mayor sentido a la realidad, hace de esta etapa un periodo crítico y difícil, existe una total contradicción en ya ser adulto o sentirse como tal pero sin dejar de ser niño.
Este periodo es un examen en el cual intervienen los padres y los maestros porque sin ellos el conocimiento y el desarrollo del individuo seria un completo y total desastre, pero para el bien de todos, el adolescente madura y crece y logra convertirse en un adulto valiosos y competente.