La Eclampsia es una enfermedad bastante común durante el embarazo, asociada a alteraciones de los niveles de tensión o presión arterial de la mujer, es el estado más grave que pueda presentar en esta condición y sólo afecta a un 10% del total de las embarazadas.
¿Qué es?
La eclampsia es un trastorno y un padecimiento de los niveles de tensión arterial en el organismo de la mujer, no se sabe que lo causa en realizad pero si es un padecimiento de mucho cuidado y vigilancia.
Es denominada la enfermedad del relámpago, ya que antiguamente se quería significar la aparición repentina de una brusca tempestad en el cielo tranquilo. Pero más científicamente hablando se entiende la eclampsia como la aparición de comas o convulsiones durante el embarazo.
Generalmente se presentan después de la semana numero veinte de gestación o en las primeras horas del puerperio, que quiere decir que es el instante exacto después del parto y que puede extenderse de 6 a 8 semanas luego de este o en los 40 días siguientes, para que el cuerpo materno vuelva a sus condiciones pregestacionales.
Es la manifestación más grave de la toxemia en la mujer embarazada se caracteriza por edemas generales, convulsiones, proteinuras e hipertensión. Esta es una enfermedad o un padecimiento producido por el embarazo y que es una de las causas de muerte en mujeres embarazadas.
Aunque estas alteraciones hipertensivas y estas convulsiones pueden llegar a ser peligrosas incluso mortales no conllevan afectaciones de carácter neurológicas en quien la padece.
Las mujeres que padecen de eclampsia ya han mutado de una preeclampsia, que no deja de ser menos peligrosa y riesgosa ninguna de las dos, es por ello el diagnóstico y su tratamiento temprano para evitar mayores riesgos es fundamental.
Cuando se llega a la eclampsia es porque algo en el tratamiento de la preeclampsia no dio resultado no fue tratada debidamente y es cuando se presentan las convulsiones en la mujer embarazada, que no necesariamente tiene que estar asociada a problemas cerebrales preexistentes.
Causas
No se tiene una causa exacta y definida de la eclampsia, lo que sí se sabe es que juega con los niveles de presión arterial de la mujer, llegando a tener un gran impacto en la salud de la embarazada
Como ya se dijo no hay ciencia cierta de los motivos que causan esta enfermedad aunque están asociados a factores cerebrales, problemas de índole vascular, del sistema nervioso, los genes y factores que tienen que ver con la alimentación y la dieta de la mujer. (Ver artículo sobre Familia Reconstruida)
Muchas de las mujeres no evolucionan en la enfermedad hasta presentar convulsiones que es el punto máximo de este padecimiento, aunque hay síntomas visibles y comunes de esta enfermedad como lo son el aumento de peso y las hinchazones.
Existen otras causas como los son los problemas vasculares, factores neurológicos y cerebrales del sistema nervioso, las dietas y la alimentación son parte importante en el desarrollo de la enfermedad.
Mucha de las mujeres que llegan a padecer de eclampsia es porque ya han pasado por episodios de preeclampsia, aunque esto no signifique que hayan tenido convulsiones, por lo que es muy difícil determinar quién las va a padecer y quien no, lo que sí se ha podido determinar es quienes las podrían padecer según algunos síntomas o signos, por ejemplo:
Cuando presenten exámenes sanguíneos anormales, cefaleas, altos niveles de presión arterial, cambios en la visión y dolor abdominal, ahora las posibilidades de presentar preeclampsia tienen a aumentar cuando la paciente tiene 35 o más años de edad, son mujeres afroamericanas, son primerizas en el embarazo, padecen de alguna enfermedad renal, diabetes o hipertensión, cuando exista la presencia de dos o más bebés o cuando se es adolescente.
Aunque la eclampsia no es muy común esta se presenta en 1 de cada 2 o 3 mil mujeres embarazadas. Ahora bien si la preeclampsia se ha convertido en eclampsia la sintomatología sería la siguiente:
Presencia de dolores musculares o molestias en la musculatura, convulsiones, estar en un estado de intensa agitación, pérdida del conocimiento y disminución de los niveles de conciencia.
Pero para ahondar más y estar más seguros del diagnóstico el médico tratante podría realizar otros exámenes tales como: un examen físico para tratar de encontrar y determinar con mayor exactitud la causa de las convulsiones, verificación de la frecuencia respiratoria y la presión arterial, además de análisis de sangre y orina para verificar otros valores.
Factores de riesgos
Existen diversos factores que pudieran incidir en que una mujer embarazada pudiera padecer y presentar eclampsia aquí te diremos solo algunos de ellos.
Los riesgos más frecuentes están en las mujeres primerizas o las que presentan embarazos múltiples.
Las mujeres con edad avanzada, es decir, mayores de 35 incluso en adolescentes menores de 18 años.
Existe un factor de riesgo en mujeres que tengan un peso corporal menor a 35 kg y el riesgo se incrementa en personas con obesidad.
El padecimiento de enfermedades crónicas también es un aliciente y agrava este padecimiento, por ejemplo el padecimiento de diabetes, enfermedades de tipo renal, hipertensión, enfermedades oftalmológicas y padecimientos vasculares. (Ver artículo sobre La Familia en la Biblia)
Cuando existan complicaciones en el embarazo tales como feto grande, embarazos múltiples, polihidramnios e hidropesía fetal o que ya haya padecido de preeclampsia en un embarazo anterior.
Síntomas
Existe una variedad de síntomas de la eclampsia antes de las convulsiones, incluso uno que el más importante es la hipertensión arterial extrema, pero debido a que la tensión es una enfermedad silenciosa es muy difícil determinar a simple vista.
Algunos síntomas son: ansiedad, dolores de cabeza, dolores de estómago o epigástricos y a veces puede sentir la visión algo borrosa, aumento de la hipertensión arterial, la hiperactividad de los reflejos tendinosos. Se recomienda reposo en cama en una habitación tranquila y oscura.
Otros síntomas son si la madre aumenta de peso a razón de un kilogramo por semana, son persistentes los dolores de cabeza, las náuseas y los vómitos, los dolores de estómago, los problemas en la visión y la hinchazón de las manos y en la cara, entonces quiere decir que estamos en presencia de eclampsia.
Diagnóstico
Existen varios exámenes médicos que pueden determinar la presencia de eclampsia en la mujer embarazada, son diversos los especialistas que intervienen en este diagnóstico.
En primer lugar se debe realizar un examen oftalmológico que determinara las alteraciones vasculares en el fondo del ojo, otro examen que se realiza para determinar la eclampsia es un examen de orina con la intención de determinar la presencia de proteínas.
Si estas proteínas en la orina son superiores a los 2000 mg/ Dl/ estaríamos en presencia o sería un indicio de eclampsia en la paciente, ahora bien otros exámenes son las pruebas de función renal, los exámenes de coagulación y los problemas hepáticos de daños en el hígado.
Entonces con las pruebas y resultados en la mano de estos exámenes al determinar que existen algunas alteraciones renales, neurológicas e hipertensivas en la paciente se podría determinar a ciencia cierta si existe o no algún indicio de padecimiento de preeclampsia o de eclampsia.
Tratamiento
Existen variables que podrían influir en el tratamiento de la paciente con eclampsia pero el tratamiento más efectivo es dar a luz al bebé, ya que esto representaría un peligro para la madre y para el niño de no ser así.
Las mujeres que están embarazadas y tienen, padecen o son diagnosticadas con eclampsia tienen un mayor riesgo de experimentar una separación de la placenta, problemas de coagulación de la sangre incluso de parto prematuro, en la mayoría de los casos lo más recomendable es acelerar el proceso de alumbramiento del bebé. (Ver artículo sobre Familia Ensamblada)
De no hacer este procedimiento se pondría en riesgo la vida de la madre y la del bebe cada uno por su lado y la de ambos en el peor de los casos, lo más recomendable es ingresar a la paciente al área de cuidados intensivos de obstetricia, para poder atender cualquier eventualidad inclusive si se llegase a presentar cualquier episodio de convulsión.
Una vez hecho esto y estabilizado a la paciente se procederá a realizar un control de la tensión arterial y con ello de los ataques eclámpticos, lo que se busca con esto es interrumpir el proceso normal del embarazo en cuanto sea posible minimizando todos los riesgos.
Ahora bien en el caso de la preeclampsia se pueden suministrar fármacos que ayuden a contrarrestar los efectos de las convulsiones así como los que pudieran contribuir a bajar los niveles elevados de tensión arterial, si existiese una preeclampsia leve el médico tratante podrá manejar la patología hasta que el bebé esté lo suficientemente desarrollado, recomendando en este caso reposo absoluto y periódicos controles médicos.
En muchos casos los doctores administran sulfato de magnesio que viene siendo un tipo de mineral para contrarrestar las convulsiones activas y también evitar unas posibles convulsiones a futuro. Ahora la administración de antidepresivos está sujeto a bajar los niveles de tensión arterial elevados regularizándolo a niveles óptimos, dando la posibilidad de interrumpir de manera segura el embarazo que es el único tratamiento posible.
Cuidados de enfermería
La enfermera que esté a cargo de una paciente con eclampsia debe tener en cuenta que se le debe atender con el mayor de los cuidados y debe tener una atención privilegiada asegurándose de su total y completo reposo y tranquilidad.
Lo primero que se debe garantizar es que se tenga un reposo absoluto, es por ello que la enfermera tratante de una mujer embarazada que esté padeciendo de eclampsia debe tener en cuenta lo siguiente y estar pendiente de que la paciente esté cómoda en posición de reposo, preferiblemente de cubito lateral izquierdo, o lo que es lo mismo descansando sobre su lado izquierdo.
Se le debe colocar un catéter venoso periférico a la paciente, y si es posible un par de estos, para suministrarle los medicamentos recetados por el médico tratante, sobre todo en caso de presentarse convulsiones será mucho más fácil administrarle el fármaco.
Es muy importante estar pendiente del confort de la paciente, lo que se recomienda que esté en una habitación aislada sin ruidos y si es posible que esté completamente oscuro. La enfermera también debe estar pendiente de la ingesta de líquidos en la embarazada.
La colocación de una sonda vesical facilitará el monitoreo de la diuresis, oliguria y la proteinuria que se podrán verificar a través de tiras reactivas y mantener un control y supervisión más estricto de la paciente. Se debe tener a la mano siempre oxígeno para aplicar oxigenoterapia en caso de ser necesario.
En caso de presentarse una convulsión la enfermera debería evitar los procesos típicos de estos casos como son las caídas y las lenguas mordidas por parte del paciente. Se debe estar atento a las aspiraciones constantes de las secreciones. (Ver artículo sobre Familia Disfuncional)
Se debe estar monitoreando constantemente en periodos cortos de tiempo la presión arterial hasta alcanzar su estabilización. Se debe estar atento a los sangrados que se pudieran presentar por cualquier vía. Ahora bien los exámenes de laboratorios indicados en pacientes con eclampsia son: BH, QS, EGO, PFH y el perfil toxicológico o toxémico.
Complicaciones
El padecimiento de la eclampsia no es solamente una simple subida de la tensión arterial, es mucho más que eso, son ataques convulsivos, la pérdida de proteínas a través de la orina, afectación en los riñones, daños a la madre y al feto.
Estadísticamente hablando el 50% de las eclampsias se presentan durante el embarazo, mientras que un 10% se dan durante el parto, pero de lo que si se está seguro es de que las eclampsias son consecuencias de preeclampsias mal tratadas, no tratadas a tiempo o imposibles de tratar y el resto de ellas se presentan en el momento exacto del puerperio.
Estos episodios se dan y se manifiestan justo cuando existen contracciones difusas de los vasos sanguíneos y estas son tan grandes que impide el paso de sangre, lo que ocasiona micro infartos, siendo el cerebro el órgano más afectado al presentarse estos episodios de eclampsias.
Estas afectaciones en el cerebro se manifiestan a través de convulsiones y son conocidas como ataques eclámpticos, estos ataques se van presentando por fases o etapas que son:
La etapa prodrómica: es cuando la paciente comienza a sentir síntomas propios de la preeclampsia grave.
La etapa de invasión: esta etapa tiene una duración de aproximadamente 30 segundos y se presenta cuando la paciente mueve la cabeza de un lado a otro y con ella los músculos de la cara.
Etapa de contracción tónica: es un proceso relativamente corto de aproximadamente 20 segundos en el cual la paciente experimenta una contracción de los músculos y una rigidez en su cuerpo de manera total, incluso la respiración es forzada por la misma tensión que experimenta el cuerpo.
Etapa de contracciones clónicas: es un proceso más largo que los demás en el cual se extiende por aproximadamente dos minutos en el cual el cuerpo experimenta contracciones y relajaciones intermitentes del cuerpo y sacudidas de la cabeza hacia adelante y atrás de manera constante, expulsando una espuma blanquecina por la boca, al pasar de los minutos estas sacudidas de la cabeza van disminuyendo, llegando así a un estado de normalidad.
Etapa de coma: es un estado de inconsciencia e inmovilidad y la respiración se realiza con dificultad, la recuperación de este estado es muy lenta y regularmente la paciente no recuerda nada de lo ocurrido.
Existen otras complicaciones en las pacientes que presentan eclampsias que son menos graves pero que igual no dejan de preocupar a los familiares y a quien la padece, entre estas dificultades encontramos los edemas pulmonares que es cuando los pulmones se inundan de sangre, ya que el corazón es incapaz de expulsar este fluido del órgano.
El fracaso renal no es otra que cosa sino el cese de las funciones de los riñones, es decir, dejan de funcionar por completo y no se produce la expulsión de la orina.
Shock circulatorio: se presenta cuando las toxinas que provocan las contracciones de los vasos sanguíneos ya no realizan esta función, llegando las arterias a su dilatación normal, lo malo es la disminución o la insuficiencia de sangre en el organismo.
Rotura hepática: es la presencia de hemorragias dentro del hígado lo que podría provocar su rotura desde adentro del mismo órgano, provocando su colapso.
Prevención
Una de las formas o maneras de prevenir la eclampsia es asistiendo consecuentemente a los controles prenatales, lo que determinara y permitirá conocer de manera temprana el padecimiento de este trastorno del embarazo.
Existe una alta posibilidad de que si el embarazo es controlado desde un principio se minimizan los riesgos de complicaciones en el padecimiento de eclampsia, ya que si esta es detectada a tiempo antes de que pueda desarrollarse en el organismo de la mujer se pueden prevenir y revertir muchas de las complicaciones conexas con esta enfermedad.
Ahora si la enfermedad está avanzada y el bebe es muy prematuro lo más recomendable es un reposo total y absoluto en la cama, bajo un control total y permanente de las presión arterial, de la orina y del peso de la paciente.
Existe la posibilidad de inducir o adelantar el parto si el padecimiento de la eclampsia es muy grave, sobre todo si el embarazo está entre las semanas 32 y 34, ahora existe una posibilidad de inducir el parto en la semana 24 de la gestación pero las posibilidades de sobrevivencia del bebé son bajas.
Lo más recomendable en estos casos es tratar a la madre con inyecciones de esteroides, lo que contribuirá a la maduración rápida del feto y de algunos órganos esenciales como los pulmones por ejemplo y así poder realizar este procedimiento de adelantamiento del embarazo sin ningún tipo de riesgos para ninguno de los dos involucrados.
Esta es un manera también de llevar un control estricto y permanente de la madre y de la evolución del feto, que en estos casos son importantísimos, tanto la supervisión como el control de ambos, de la madre y del bebe, evitando así futuras complicaciones.
En el postparto
La eclampsia es una trastorno peligroso durante el embarazo, pero también lo es después de este, se puede presentar justo después del alumbramiento a los días sucesivos, por lo que hay que estar muy atentos.
El trastorno de la eclampsia se caracteriza por presentarse a través de convulsiones en la paciente, son de carácter generalizadas lo que podría acarrear que la mujer cayera en estado de coma, todo ello sin que exista un padecimiento previo de daños o lesiones cerebrales que provoquen estos ataques.
Se han presentado casos en los que la mujer durante el embarazo no presento síntomas de preeclampsia o eclampsia pero si las presento después del parto y no solo los síntomas el padecimiento de la enfermedad en si.
Hay que tener claro al diferenciar entre un padecimiento y otro, aunque estén relacionadas directamente la una de la otra aunque una antecede a la otra existen marcadas diferencias, pero lo inusual es que esta enfermedad se presente luego del parto lo que sí debería de encender las alarmas ya que podría acarrear graves y serias consecuencias.
Como ya hemos dicho a lo largo de este articulo, la eclampsia se manifiesta a través de estados convulsivos de la embarazada durante la gestación, en el proceso del alumbramiento y posterior a este y cuando se presenta posterior a este se conoce como la eclampsia post parto.
Si una parturienta una vez expulsada la placenta manifiesta episodios convulsivos, eso quiere decir que estamos en presencia de una eclampsia post parto se han dado ocasiones en las que la eclampsia se manifiesta hasta 48 horas o incluso semanas después del parto, aunque lo usual son 48 horas para determinarla y si es después de ese periodo es una eclampsia atípica.
En estos casos se presenta en menos del 1% de las mujeres y de ese total casi todos los casos no llegan a ser serios o severos, aunque se desconoce del porque de este fenómeno sus causas y los motivos de su aparición.
Aunque existen algunas conjeturas o estimaciones de las causas por las cuales se presenta este tipo de trastorno como lo es la eclampsia post parto se dice que está asociada a la edad de la mujer (mayor de 35 años), a los embarazos múltiples y si la madre es una adolescente.
Si el embarazo es por primera vez o si se han presentado padecimiento de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades renales, hipertensión o sospechas de ella, la diabetes es otra de las probables causas de este padecimiento, los problemas vasculares son otro de los alicientes para la aparición de la enfermedad, la alimentación y la genética también juegan un papel determinante en estos casos.
Otro dato que llama la atención es la aparición repentina de la enfermedad sin antes manifestar sintomatología que alertara a los médicos y a las propias pacientes de este padecimiento, estas apariciones imprevistas podrían desencadenar problemas cerebrales en la mujer a corto y largo plazo llegando a ser mortales en el peor de los casos.
Algunas de las complicaciones que se podrían presentar en estos casos serian: alteraciones visuales o diplopía que es la visión doble, dolores de cabeza, vasocontricciones cerebrales, edemas, hemorragias cerebrales y en el peor de los escenarios llegar a estar en coma.
El principal indicativo de que se está en presencia de una eclampsia post parto son las convulsiones, que es la manifestación más evidente y notoria de este trastorno, pero antes de llegar a esto a veces la mujer manifiesta algunos síntomas que son: severos dolores de cabeza en la zona occipital, alteraciones en la visión, como por ejemplo visión borrosa, visión doble, perdida de la visión entro otros, dolores musculares y dolores abdominales.
Otras manifestaciones físicas de la presencia o de la posible aparición de la eclampsia post parto son la ausencia de orina, estados mentales alterados, pérdida de conocimiento y en algunos casos alteraciones de los estados mentales, intensas agitaciones de euforia, sincopes, entre otros.
Tanto la preeclampsia como la eclampsia son enfermedades que atacan a las mujeres embarazadas una durante en el embarazo y otra después incluso, hay que estar atentos a ambas ya que podrían traer consecuencias fatales para las mujeres.
Ya que como hemos dicho la preeclampsia antecede a la eclampsia y a veces se presenta sin síntomas después del parto, así que muy pendiente de los síntomas y las señales que nos estén enviando para atacar a tiempo cualquier eventualidad.
Tratamiento
El principal tratamiento para atacar los síntomas y la enfermedad en si son los fármacos anti convulsionantes, es lo mas recomendado para la eclampsia y sus efectos en las mujeres.
Este tratamiento contra la eclampsia sirve para atacar el proceso convulsivo en si cuando se esté presentando así como también de manera preventiva en pacientes o mujeres que ya hayan padecido de preeclampsia o cuando exista la sospecha del trastorno.
El sulfato de magnesio que es lo usual en estos casos se puede administrar de manera oral o endovenosa, es lo más seguro para la madre en el caso de aun estar en estado de gestación, ahora si su condición es de lactante se debe tomar en cuenta esto para la receta de la medicación aunque en este proceso el espectro de medicamentos se amplía un poco más para tratar este padecimiento.
Ahora bien, lo recomendable para las mujeres con crisis convulsivas es tomar algún relajante muscular o dosis elevadas de medicamentos, hasta estar seguros de que los niveles en sangre sean los adecuados y evitar que se repitan los ataques.
Muerte por el trastorno
En américa latina la eclampsia es la responsable de la muerte del 25% de las mujeres embarazadas, según datos aportados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) estas cifras son alarmantes y preocupantes.
El 20% de las mujeres no desarrollan o no presentan síntomas premonitorios a la hora de una crisis convulsiva, estos se presentan de manera abrupta es por ello que se les recomienda la ingesta de sulfato de magnesio para prevenir estos efectos. Es un muy buen método de prevención, salvando las distancias de cada caso en particular.
El estar atento y pendiente de los síntomas de la eclampsia contribuirá en la prevención de las temidas e indeseadas convulsiones o de alguna otra complicación médica asociada a ellas.
La detección a tiempo y el tratamiento correcto de la preeclampsia, así como controlar los niveles de tensión serán determinantes para evitar males mayores y tragedias vinculadas al padecimiento de la preeclampsia y la eclampsia.
Es de vital interés e importancia un buen control prenatal, así como el intraparto y el puerperio a manera de prevención de la eclampsia, es muy importante y altamente recomendable una dieta sana y balanceada además de acompañarla de ejercicio físico para evitar la aparición de enfermedades como la diabetes y los trastornos de tensiones altas.
Estas son algunas de las medidas que se pueden tomar para evitar ser víctimas de la preeclampsia y de la eclampsia, ya que estas complicaciones de la presión arterial, las convulsiones, la ceguera, la perdida de la conciencia, entre otros síntomas son fatales y resultan mortales.
Esta es una enfermedad que se presenta según algunos especialistas en los extremos de la vida, o bien sea en adolescentes de 13 a 17 años o en mujeres ya adultas de 35 años o más.
Hay que tener cuidado a los síntomas de alerta cuando se presenten, si es que se presentan tomar sulfato de magnesio aunque esto trae como consecuencia efectos secundarios para quien lo toma como lo son los populares sofocones.
La presencia de eclampsia puede causar desprendimiento de la placenta y accidentes cerebrovasculares en la madre lo que le podría ocasionar la muerte si no se trata a tiempo y de manera debida.
El control pre natal y post natal son importante ya que como se dijo anteriormente esta enfermedad puede aparecer de manera intempestiva, es importante que la paciente le comente al doctor lo mas mínimo que pudiera presentar o sentir, ya que este le indicara si es normal o no dentro del proceso de gestación o posterior a este.
Preeclampsia y eclampsia
Existe una diferencia marcada entre ambas enfermedades por ejemplo la preeclampsia es una alteración leve o no de los niveles de tensión mientras que la eclampsia es el padecimiento de convulsiones a veces inexplicable en una mujer embarazada.
Estas enfermedades afectan a un universo importante de mujeres que van desde el 3% al 7% de mujeres embarazadas, pero ambas tienen algo en común se presenta justo después de las 20 semanas del embarazo y un 25% de estos casos aparecen en mujeres que ya han pasado por el proceso del parto, en algunos casos se presenta a los 4 días después del parto en otros se puede demorar hasta 6 semanas en aparecer.
Algunos especialistas coinciden en que la preeclampsia mal tratada se va haciendo presente de nuevo con el tiempo y luego de manera súbita avanza a una estado de eclampsia lo que ocurre en una de cada 1200 mujeres con preeclampsia, resulta fatal para quien la padece cuando la preeclampsia no es bien tratada.
La hinchazón en manos y cara son síntomas evidentes de la aparición de la preeclampsia, puede tornarse grave si ocasiona disfunción orgánica significativa, el síndrome de HELLP se presenta en un 10% o un 20% de mujeres con preeclampsia o con características graves de eclampsia.
Para atacar de manera contundente la eclampsia se deben administrar altas dosis de sulfato de magnesio. Ante estos acontecimiento que se pueden tornar graves para la vida de la madre y el bebe, se recomienda una supervisión de cerca y permanente además de estar atento ante cualquier alteración o sintomatología.
Eclampsia y anestesia
La eclampsia es la presencia de convulsiones y altos índices de presión arterial en la mujer embarazada sus complicaciones son derrame cerebral, insuficiencia renal, edema pulmonar, entre otros síntomas por eso hay que estar muy atento a los niveles de anestesia a la hora del parto.
Al ser un paciente diagnosticada con eclampsia lo primero que le suministran es sulfato de magnesio, lo que posee un poderoso efecto vasodilatador lo que prolonga el efecto de los sedantes en este caso de la anestesia.
Entre otras funciones o efectos inhibe la producción de plaquetas, disminuyendo considerablemente estos niveles en sangre, lo que podría generar afecciones respiratorias severas, podrían presentarse frecuencias bajas de la respiración, parálisis en la respiración y en el peor de los casos un paro cardio respiratorio.
Que se indica para contrarrestar este efecto administrar una dosis de gluconato de calcio, un vasodilatador y se evitara la administración de fármacos que depriman al Sistema Nerviosos Central, que se recomienda abstenerse de administrar tratamientos a base de sodio en grandes cantidades, ya que podrían generar edema pulmonar o crisis hipertensivas,
En el caso de los diuréticos solo pueden ser administrados en caso de insuficiencias renales o si se presentan edemas pulmonares. Los sedantes y el uso de los barbitúricos se asocia mas a los riegos en el feto que a la madre.
Además de los edemas pulmonares existen edemas faríngeos, laríngeos y lenguales y esto podría imposibilitar una correcta entubación endotraquial de ser necesaria, lo que provocaría una presión intercraniana provocando hemorragias y convulsiones.
Hay que estar muy atento a los medicamentos que se estén suministrando, y en que cantidades así como también de los anestésicos utilizados en los casos de partos o inducción de los mismo por problemas de eclampsia, ya que muchas de estas sustancias puede reaccionar de manera perjudicial para el organismo de la madre y del bebe.
Eclampsia en perros
Es un padecimiento metabólico que lo manifiestan las hembras en el estado de gestación o después del parto, se puede manifestar dos o tres semanas después del parto.
Es una enfermedad que se presenta usualmente en los primeros cinco o diez días después del parto, es producida por la perdida de calcio a través de la leche que alimenta a sus crías. Y se presenta mas que todo en caninos de raza pequeña, como por ejemplo caniche toy, el pincher enano, pequines y el dachshund.
Hay que estar muy atento a la alimentación del can durante la gestación y suelen presentarla mas los perros que se alimentan generalmente de carne, deben tener una alimentación equilibrada de carne, leche, queso y verduras o bien se le puede administrar un alimento Premium de alta calidad para cachorros que está indicado para perras en estado de gestación.
Este tipo de alimentos posee complementos vitamínicos y de minerales que son recomendados en estos casos. La disminución de calcio en la sangre es lo que causa o genera la eclampsia en las perras, el desgaste de este mineral es muy elevado ya que le aporta a los cachorros en el proceso de gestación y luego de haberlos tenido.
Los síntomas clásicos de esta enfermedad en los animales es la intranquilidad del can, se tambalea, se agita, tiembla y se tumba sobre un lado como si presentara algún tipo de espasmo, sus extremidades suelen ponerse rígidas en momentos. Pero en todo ese proceso el animal está consciente.
Para quienes no están muy informados o familiarizados con este trastorno se aventuran a suministrarle al animal remedios caseros o simplemente acuden de inmediato al veterinario que sería la opción más viable.
En cuanto a los espasmos estos se repetirán cada cierto tiempo, lo importante es aplicarle un tratamiento, ya que si se deja así al paso de unas doce horas podrían morir la perra, bien sea por una falla cardíaca o por agotamiento.
¿Qué se puede hacer para revertir esta ausencia de calcio o qué se recomienda?, la administración de suero y la aplicación de inyecciones refrigerantes para mantener la temperatura del animal mientras le suministran el suero por vía endovenosa, que se sugiere que se suspenda la lactancia para evitar un segundo ataque.
¿Qué hacer con los cachorros en este proceso? pues suspenderle el amamantamiento por lo menos por 24 o 48 horas, se deben alimentar de manera artificial, es decir, con leche comercial para cachorros que se puede adquirir en lugares destinados para ello, esto mejorará la salud de ambos.